Los tres países que abastecen a Lidl de aceite de oliva
La cadena alemana recurre a su marca blanca para comercializar aceite más barato para el consumidor.
Con el precio del aceite disparado en todos y cada uno de los supermercados de nuestro país ya se ha convertido en la norma, por lo que, al estar lejos de ser un hecho puntual, los consumidores se ven en la obligación de tomar medidas con el objetivo de reducir los costes en la medida de lo posible.
En este contexto, las marcas blancas suponen un alivio para millones de personas que no pueden permitirse pagar más de 10 euros por un litro de aceite, motivo por el que muchas de las grandes multinacionales están viendo como sus productos oleícolas son cada vez más vendidos en detrimento de las corporaciones aceiteras.
Por lo general, las grandes compañías, bajo sus marcas blancas, buscan ofertar un producto más barato minimizando la pérdida de calidad, por lo que llegan a acuerdos con cooperativas, almazaras o distribuidoras.
¿De dónde llega el aceite de marca blanca al Lidl?
La multinacional alemana centra la comercialización de su aceite de oliva fundamentalmente a tres países: España, Marruecos y Portugal, estando los tres en los primeros puestos de productores de aceite a nivel mundial dadas sus condiciones climáticas.
Según informan en sus etiquetas, el aceite de Lidl, denominado Olisone, también se nutre de los aceites virgen extra y virgen procedentes de Acesur y Sovena, de Portugal, que cuenta con explotaciones en los tres países.
Por otro lado, las variedades de arbequina, picual y hojiblanca sí son procedentes de empresas españolas. En esta lista se encontrarían Cexac (empresa de Extremadura dedicada a aceites y cereales) que pertenece al grupo sevillano Migasa y Mueleoliva, ubicada en Córdoba y que está también bajo el control de Migasa.