Los olivos se quedan desprotegidos
El Ministerio de Agricultura no incluirá el olivar en el paquete de las ayudas directas excepcionales aprobadas como consecuencia de la sequía y la guerra en Ucrania.
En medio de la preocupante situación que atraviesan los agricultores españoles que se dedican al cultivo del olivar, golpeados por la sequía, la subida del precio de las materias primas por culpa de la guerra de Ucrania y por los vaivenes del precio del aceite de oliva en los supermercados, la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha levantado la voz en defensa de los olivareros que, pese a las amenazas que se ciernen sobre la producción, seguirán excluidos de las ayudas directas excepcionales anunciadas en mayo por el Ministerio de Agricultura.
Con una cosecha a la baja y una previsión igual de sombría para la próxima temporada, la Unión de Uniones ha señalado en un comunicado que la exclusión de los olivareros de las ayudas del Ministerio de Agricultura es "incomprensible e injusta". La organización, según recoge Agro Información, asegura que la situación que atraviesa el sector ya debería haber sido suficiente para su inclusión en el paquete de medidas: "Es incomprensible e injusto que el Ministerio haya dejado fuera de estas ayudas a los olivareros, que con dos campañas de producción muy malas lo van a pasar francamente mal; tan mal, al menos, como otros sectores que sí se han incluido", subraya la organización agrícola.
La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos argumenta que esta negativa pasa por alto la importancia socioeconómica del olivar, que es un pilar fundamental en muchas regiones de España, generando empleo y actividad económica. Además, añaden, el cultivo también desempeña un papel crucial en términos de medio ambiente ya que ayuda a prevenir incendios y mantiene la biodiversidad.
La organización lamenta la falta de apoyo tanto del Ministerio como de algunas Comunidades Autónomas, en contraste con la inversión de la Unión Europea en otros países. Para expresar su descontento y exigir una intervención gubernamental más sólida, la Unión de Uniones convocó una manifestación en julio frente al Ministerio en Madrid.