La zona más inhabitada del mundo busca trabajadores 'normales' a cambio de 150.000 euros y alojamiento incluido
Los solicitantes deben estar preparados para un clima extremadamente frío donde las temperaturas pueden bajar hasta -57°C.
El Programa Antártico de Australiano ha lanzado una campaña de contratación a gran escala. En ella se anunciaron más de 150 puestos de trabajo en la estación de investigación científica de la isla de Macquarie. Los puestos cuentan con un paquete salarial único, que puede alcanzar hasta los 150.000 euros al año, y los empleados también reciben alojamiento y comidas gratuitos.
Los puestos anunciados, según ha informado el medio BitcoinBázis, son muy variados. Se buscan jefes de estación, electricistas, carpinteros, especialistas en tecnología y cocineros, entre otros. Además del salario base, también existe una bonificación especial de 60.807 euros.
Sin embargo, el trabajo antártico no es para todos. Los solicitantes deben estar preparados para un clima extremadamente frío donde las temperaturas pueden bajar hasta -57°C. En verano, la estación puede albergar hasta 100 personas, pero en invierno sólo quedan 15, afrontando el aislamiento y unas condiciones muy duras.
La vida comunitaria es uno de los elementos más importantes de la vida en la Estación Científica de Macquarie Island. "Los candidatos que no puedan trabajar en equipo o adaptarse a la vida comunitaria no serán aptos para este puesto", destacó Maree Riley, responsable de contratación. La convivencia requiere cualidades personales como espíritu de equipo, flexibilidad y perseverancia. Por tanto, el proceso de selección incluye rigurosas pruebas psicológicas y médicas para garantizar la idoneidad de los candidatos.
La mayoría de los empleados de la estación son hombres, en concreto un 82%, mientras las empleadas muejres solo alcanzan el 18%, según las estadísticas. Por ello, el programa australiano tiene como objetivo aumentar la proporción de mujeres, por lo que se anima a las solicitantes.
La estación está lejos de la civilización, pero la vida en este enclave no es aburrida. Los empleados pueden practivar diversos deportes, como jugar al tenis o al billar, escalar montañas u optar por el ciclismo sobre hielo.
El jardín hidropónico suministra verduras frescas a los residentes de la estación y también se organizan eventos comunitarios periódicamente. La belleza natural de la Antártida, la vista de témpanos de hielo, colonias de pingüinos y focas, hace de este trabajo un destino muy especial.