Espantada de los trabajadores de Bimbo a la nueva empresa
La mayor parte de la plantilla despedida de la fábrica que se prepara el cierre definitivo en Valladolid rechaza los puestos que le ofrece la compañía compradora.
La fábrica de Bimbo en el polígono de San Cristóbal, en Valladolid, se prepara para echar el cierre definitivo, pero el destino de muchos de sus empleados sigue siendo todavía una incógnita. Martínez Marcos, la empresa de transporte que ha adquirido las instalaciones, ofreció 50 empleos a los trabajadores afectados, pero más de la mitad han decidido no optar a esas posiciones, principalmente, por las condiciones y perfiles requeridos.
De los 50 empleos propuestos, 30 son para camioneros, una salida que a muchos de los que trabajan en la planta vallisoletana de Bimbo les parece inasumible después de pasar décadas en funciones completamente distintas. Aunque la empresa se ha comprometido a pagar la formación de todos los contratados, solo "tres o cuatro" han mostrado interés en las ofertas de trabajo, según señala el comité de empresa a la web El Día de Valladolid. Los puestos en los talleres o los de mantenimiento también han tenido una tibia acogida, mientras que los pocos puestos administrativos, solo seis, han desbordado la demanda.
Por otro lado, 46 empleados de la multinacional mexicana han optado por trasladarse a otras plantas de Bimbo, con ayudas económicas para el transporte o la vivienda, con la de Medina del Campo como principal destino. De todos estos empleados, además, cuatro se mudarán a Puente Genil y otro a la planta de Solares. Otras alternativas, como Azuqueca de Henares, no han recibido ninguna solicitud.
El resto de la plantilla de la planta de Bimbo que echa el cirre afronta un futuro algo más incierto, ya que 43 trabajadores -mayores de 55 años- se acogerán al plan de rentas que les asegura el 85% del salario hasta la prejubilación. Sin embargo, para 66 empleados de los despedidos, la recolocación en Martínez Marcos o en otros sectores, a través del plan de reindustrialización no resultan atractivas. Según el comité, muchos esperan que surjan ofertas en la industria alimentaria o en la automovilística que estén más vinculadas a lo que es su experiencia laboral previa.
Mientras tanto, la fábrica de San Cristóbal vive sus últimos días de actividad, con el cese oficial previsto para el 31 de diciembre. Tras la última jornada de producción, que será el día 30, comenzará el desmantelamiento de las instalaciones, que se prolongará hasta febrero antes de su entrega final a Martínez Marcos en marzo.
