Rubiales rechaza dejar la RFEF y carga contra el "falso feminismo": "No voy a dimitir"
Contra todo pronóstico. El presidente del organismo ha dedicado su intervención para defender que el beso con Jenni Hermoso fue "consentido" y como el que hubiese dado a su hija y ha criticado que lo han hecho contra él ha sido "un asesinato social".
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Contra todo pronóstico. Luis Rubiales, tras más de 20 minutos de intervención cargando contra el feminismo, dirigentes políticos y las críticas que ha recibido, ha roto con todo, anunciando que no va a dimitir, en lo que considera "un asesinato social" y tras dar un "pico" que fue "espontáneo, mutuo y consentido" por Jenni Hermoso.
Las presiones, las críticas y las diferentes denuncias y acciones legales por su polémica actitud tras la final del Mundial en el Estadio Australia de Sídney parecen no haber sido suficientes, en lo que considera actitudes propias de la celebración "fruto de la emoción" tras ganar un título mundial.
Después de acordarse de la gente "silenciada", ha pedido perdón "sin paliativos por unos hechos que ocurrió en el palco". "Me agarré esa parte del cuerpo, que ya habéis visto. Hemos pasado mucho, Jorge (Vilda) a otro nivel más pequeñito, pero te han querido hacer a ti lo mismo que me han hecho a mí", ha añadido.
Rubiales ha puesto en valor el equipo de Jorge Vilda y ha reconocido que se ha emocionado muchísimo con la victoria de España. "Nada más ganar el Mundial, tu primera reacción fue girarte al palco y dedicármelo". "En ese momento hice esa señal de 'ole tus huevos'", ha señalado.
Después de dar explicaciones sobre lo sucedido en el palco del Estadio Australia de Sídney, ha hablado sobre "el pico" con Jenni Hermoso. "Quiero decir que, por supuesto, quién vea el vídeo, ante 80.000 personas y toda la gente que había allí, el deseo que podía tener en ese beso era el mismo que podía tener dándole un beso a una de mis hijas", ha defendido.
Cree que ha sido "un asesinato social"
Pero Rubiales no se ha ido sin perder la ocasión y, además de decir que el beso era consentido, ha criticado que se está tratando de hacer "un asesinato social". "Ser campeona del mundo es lo más grande que hay. Hemos hecho mucho los dirigentes", ha razonado.
"La igualdad no es diferenciar entre lo que dice el hombre y lo que dice la mujer. Yo hoy estoy diciendo la verdad aquí. Vosotras (sus hijas) sí que sois feministas de verdad", ha expuesto.
Rubiales ha justificado que "no les importa las personas". "La señora Yolanda Díaz, la señora Montero, la señora Belarra, el señor Echenique se han referido a esta acción como que ha sido sin consentimiento, agredir, ¿qué pensarán las mujeres que han sido agredidas sexualmente?", ha cuestionado.
El hasta ahora presidente de la RFEF ha proseguido, anunciando que va a "ejercer acciones contra estas personas". "Luego, los cuatro o cinco que siempre aparecen. El fútbol español sabe quién es quién", ha apuntado.
Un cambio inesperado
El giro de guion de Rubiales que se produce después de que el propio presidente de la RFEF filtrara a su equipo cercano que iba a presentar su dimisión este mismo viernes.
Una estrategia que, pese a que parecía muy poco probable, por no decir imposible, podría haberle venido bien al propio dirigente del organismo.
Filtrando que se iba a ir de la RFEF, la Asamblea Extraordinaria de este viernes le servía para asistir a su, metafórico, funeral y ver los apoyos públicos que ha recibido y, sobre todo, las críticas de los diferentes presidentes territoriales de las federaciones.
Algo que se ha podido ver desde el principio del acto, cuando Rubiales ha arrancado su discurso con no tantos aplausos de los que, finalmente, tras anunciar su decisión sí que ha recibido al final del mismo.
Respaldo total a Jorge Vilda
Rubiales ha querido comparar el "acoso mediático" que ha recibido en los últimos días, con el que asegura que ha recibido el técnico de la selección femenina, Jorge Vilda.
También ha defendido que la palabra "campeones" sirve para hablar "de hombres y mujeres". "Todos ustedes son campeones del mundo del Mundial de FIFA femenino", ha destacado.
Y, mirando a Vilda, le ha ofrecido un nuevo contrato a Vilda para los próximos cuatro años "un contrato de medio millón de euros al año".
"Jorge, qué emoción sentí, creo que fue el día más feliz en mis cinco años de mandato. Quiero hacer un anuncio que tu no sabes, he activado los mecanismos para que Andreu comience una negociación contigo en la que te quedes los próximos cuatro años cobrando medio millón al año", ha explicado.