La madre de Rubiales asegura que su hijo le ha pedido dejar el encierro pero que seguirá "hasta que el cuerpo aguante"
Ángeles Béjar quiere "llegar hasta el final" para hacer justicia con su hijo e insiste en pedirle a Jenni Hermoso "que diga la verdad" del beso.
"Hasta que mi cuerpo aguante", insiste la madre de Luis Rubiales, Ángeles Béjar, firme en su intención de seguir encerrada en una parroquia de Motril (Granada) hasta que Jenni Hermoso "no diga la verdad".
La señora Béjar ha confesado este martes a los medios que incluso su hijo le ha pedido que acabe ya su encierro, pero que ella se ha negado, alegando que mantiene firme su voluntad de pedir 'justicia' ante la "cacería" contra el expresidente de la RFEF.
En declaraciones a los medios de comunicación presentes en el exterior de la Parroquia de la Divina Pastora de Motril, Béjar ha manifestado que esta situación "se soluciona diciendo la verdad porque era una anécdota", como recoge Europa Press.
"Mira dónde ha llegado", ha asegurado a los medios sobre la situación creada a posteriori, antes de explicar que se encuentra bien y de confesar que había pasado la noche en una silla.
Cerca de esa iglesia de Motril se ha celebrado este martes una manifestación de familiares, amigos y vecinos en apoyo de Luis Rubiales. También ha tenido lugar una misa en la parroquia de la Divina Pastora de Motril, donde se encuentra la madre
Ángeles Bejar ha sido apartada fuera de la vista de sus convecinos tras dos días "sin comer", en una protesta para que Hermoso vuelva "al criterio" sobre el beso en los labios que su hijo le dio tras la victoria de la selección española
"Está delicada porque le operaron de una pierna"
Entre los testimonios de este martes a las puertas de la Divina Pastora, Ángeles Montes, que ha señalado a los periodistas que es amiga íntima, ha explicado que ella ha lamentado "la injusticia que estaban haciendo" con el directivo del fútbol español, señalando que cree que la madre está dispuesta a "llegar hasta el final" con su protesta.
Ha mostrado su preocupación a las puertas del templo pues "está delicada porque la operaron de una pierna" y "lo estará pasando muy mal" antes de enviarle mensajes telefónicos, en tanto la iglesia ha permanecido cerrada en la mañana de este martes. Béjar es una mujer "espiritual", que "cree mucho en Dios" por lo que está "rezando".
"Cualquier madre por un hijo hacemos cualquier cosa", ha indicado esta amiga a Europa Press, añadiendo que no cree que Rubiales "haya llegado a hacer una agresión sexual". Otra vecina que ha hablado con la prensa ha sido Loli, quien ha dicho entender la protesta, aunque "le perjudica a ella".
Esta vecina ve "malamente" que haya una iniciativa, en referencia a la que tiene previsto plantear IU-Equo en septiembre en el Ayuntamiento de Motril, para retirar la Medalla de la Ciudad a Rubiales porque "si se la ha ganado" es "porque lo merecía" y ha reducido lo que está ocurriendo en la RFEF con que vendrá un "enchufado detrás más gordo que él para meterse".