¡Que no se escape el PP!
Sería muy preocupante que la recuperación llevara a los ciudadanos a olvidar todos los recortes puestos en marcha por el PP que harán que la vida de los españoles nunca vuelva a ser la misma y que todos los derechos adquiridos durante años y eliminados por el PP no vuelvan.
Nunca un Gobierno había deseado tanto la llegada de una noticia como los dos últimos el anuncio de la recuperación económica. Rajoy está cerca de su sueño: poder anunciar el fin de la crisis. Los estamentos financieros ya lo adelantan, como el último informe de Morgan Stanley, que bajo el título de Viva España aconseja comprar deuda española, aunque tampoco sería raro que una vez más los analistas internacionales se equivoquen en sus previsiones. No fueron capaces de ver llegar la mayor crisis de la historia ¿por qué ahora van a acertar con la salida?
Una cosa muy distinta es que la salida de la crisis permita al Gobierno del PP ganar las próximas elecciones municipales, autonómicas y generales. La salida supone la recuperación de la macroeconomía, pero no garantiza la recuperación al mismo tiempo de la economía real, la que sufren los ciudadanos, la que han cargado sobre sus espaldas sin haber sido los culpables de generarla.
Sería muy preocupante que esa recuperación llevara a los ciudadanos a olvidar todos los recortes puestos en marcha por el PP que harán que la vida de los españoles nunca vuelva a ser la misma y que todos los derechos adquiridos durante años y eliminados por el PP no vuelvan, o al menos no lo hagan del mismo modo que antes. Los recortes en la educación, la sanidad, la reforma laboral de las pensiones... y que siempre justifican en que es el único camino posible, sin decir que es el programa que siempre hubieran deseado poner en marcha y que ahora lo pueden hacer con la justificación perfecta.
Y lo que sería más grave: que un Gobierno que tiene el caso de corrupción política más grave visto en este país, como es Gürtel y el caso Bárcenas, no lo pagara ante la justicia y ante las urnas.
Hace varios días, a cuenta de esta preocupación, hablando con dos amigos, ponían luz sobre el tema.
Alejandro me decía:
"Estoy hasta las orejas de conceptos económicos ficticios [...] Hay que cambiar el modelo global. Y dentro de esos datos económicos que funcionan a base de botones de ordenador, agencias de calificación y dinero inexistente hay un dato que es el de la deuda superando el 90% del PIB [...] Por tanto, el paro va a seguir subiendo y los servicios bajando. Eso es lo que entendemos los parados. [...] Los que pagamos medicamentos. Los que no tienen beca y no pueden estudiar. Los que están a punto de ser desahuciados".
Podría seguir con más, pero lo considero suficiente para entender a un parado, con estudios universitario, joven, y que es uno de los que carga sobre sus espaldas esta crisis que no ha creado.
Pero si no era suficiente con la opinión de Alejandro, me encontré con Mario, que sí tiene trabajo pero que me dijo:
"Mi madre tiene cáncer por segunda vez en 8 años. Esta vez es de hígado, se lo detectaron a principios de año con tres meses de quimio muy potente. Ahora toma quimio en pastillas. Mi padre murió de cáncer de pulmón hace 8 años. Mi madre cobra 590 euros de pensión de viudedad aunque estuvo cobrando unos 400 euros varios años hasta cumplir los 60. [...] Vamos a hablar con claridad, le han subido la luz, la basura, el IBI, no le han compensado en el último año la pensión según la inflación, le han empezado a cobrar un tanto de los medicamentos, y otros los han quitado de la Seguridad Social teniéndolos que pagar íntegramente. [...] Quitaron las urgencias en mi pueblo teniendo que desplazarse a Plasencia pagando a su vez la ambulancia. Y ahora tiene que pagar un tanto de la quimio que toma y que le dan en Plasencia".
Estas dos opiniones, reales como la vida misma, llenas de sentimiento y sufrimiento, muestran el sentir de parte de la población. Sería suficiente como para no permitir que un Gobierno que tanto daño ha generado se fuera de rositas, pero como la mente intenta eliminar el sufrimiento y olvidarse de lo malo, puede que el PP no sufra electoralmente la derrota que se merece. En este caso yo recomiendo que cuando se vayan acercando las elecciones leamos otra vez este artículo, para que no volvamos a cometer los errores del pasado, porque como muchas veces se ha dicho, el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.