30 cosas que hacemos a los 30 y no hacíamos a los 20
De los veinte a los treinta pasan un montón de cosas, lo cual hace que no veas casi nada de la misma manera. ¿Quién te habría dicho, mientras te bebías los minis de calimocho, que diez años después te tomarías el gin-tonic aderezado con bolitas de enebro?
Ay, la sabiduría de una década...
1. Gastar cinco euros más en un cóctel para evitar la resaca.
2. Acordarnos de llevar bolsas reutilizables.
3. Dejar de escatimar en el profesional que te tiñe el pelo.
4. Reconsiderar lo divertido de Nochevieja. (Nada).
5. Pagar la cuenta para evitar dividir el precio de un queso en cuatro.
6. Leer la información pura y dura antes que la sección de estilo.
7. Presumir de que te hayan cardado el pelo.
8. Aunque hace años que no somos estudiantes, volvemos a usar la expresión "mañana es día de cole".
9. Pagar más por un electrodoméstico que dure más tiempo.
10. Bajar "belleza" en la lista de cosas que buscamos en nuestra pareja.
11. Ir a restaurantes solos, deliberadamente, y disfrutar de ello.
12. Pasar de tener damas de honor.
13. Pensar en poner fin a una amistad con alguien que sugiere sacar una foto de grupo en traje de baño.
14. Preguntar por la política de devoluciones.
15. Hablar sobre el tiempo. Tener fuertes emociones asociadas a cierto tipo de tiempo. Como la lluvia.
16. Después de volver de unas vacaciones fantásticas decir "qué bien se está en casa".
17. Llevar la ropa interior a juego.
18. Gastar más dinero en vuelos sin escala.
19. Acordarse de coger las sobras de un restaurante, y después, no olvidarte de comerlas.
20. Parar de dejar cargadores de móvil por todos los lados.
21. Pensar que los planes son una idea maravillosa hasta que es hora de salir de casa.
22. Entender que los bañadores pueden ser sexys.
23. Leer el libro antes de ver la película. O evitar ver la película si nos encantó el libro.
24. Reflexionar sobre el momento del día en el que iremos al supermercado.
25. Seguir a más expertos en decoración de interiores que a blogueros de moda.
26. Pagar la cuota de almacenamiento de Gmail.
27. Hacerte el café en casa.
28. Usar el sistema de reservas de la biblioteca.
29. Disfrutar de un puente sin planes en lugar de buscar frenéticamente planes para todas las vacaciones.
30. Darte cuenta de que la "comida de las resacas" realmente empeora las resacas.
Este artículo fue publicado originalmente en The World Post, y ha sido traducido del inglés por María Ulzurrun.