Errejón: "Me gustaría ser Isco"
El secretario de Análisis Estratégico y Cambio Político de Podemos se somete a nuestro cuestionario del Mundial.
De pequeño, Íñigo Errejón jugaba al fútbol con su padre y su hermano en la madrileña Casa de Campo. Él se creía Michael Laudrup. Ahora, estos días vive con la misma pasión el Mundial. Ve casi todos los partidos, hasta un Senegal-Japón. Considera a Iniesta como la piedra angular de la Selección y se reencarnaría en Isco. Aquí tienes sus mejores golazos-respuestas.
¿Dónde estabas cuando España ganó el Mundial de Sudáfrica? ¿Cómo lo celebraste?
Estaba de viaje en Italia. Ese verano estaba de estancia doctoral en la Universidad de Bolonia, y vinieron a vernos a mí y a mi compañera Sergio Pascual y Auxiliadora Honorato. Alquilamos un coche y bajamos al sur. Por el camino hicimos noche en un camping donde conseguimos una televisión diminuta en la que ver el partido. Lo celebramos en la piscina del camping, en medio de unos días de los que guardo un recuerdo muy hermoso. Los italianos iban con España, había mucha complicidad latina. Nos sentíamos como en casa.
¿Cuál es el partido de un Mundial que recuerdas más emocionante?
Los cuartos de final en los que Italia nos eliminó del mundial USA 94. El gol fallado de Julio Salinas, el codazo de Tassotti y la nariz rota de Luis Enrique... Lo vi en casa de un vecino y salíamos a la terraza a contarle a gritos a otros chavales lo que iba pasando.
¿Cuál era tu jugador favorito de niño?
Michael Laudrup, que me parecía la inteligencia y la elegancia reunidas en un jugador. De pequeño mi padre nos llevaba a mi hermano y a mí a la Casa de Campo de Madrid a jugar al fútbol y siempre quería jugar como él y hasta creo que lo intentaba imitar, con escaso éxito. Recuerdo en particular sus pases a un lado mientras con la mirada parecía señalar el lado contrario, dejando a las defensas clavadas.
¿Qué jugador de La Roja es imprescindible?
Iniesta es la piedra angular. Ha sido durante una década el cerebro de la Selección y siempre ha encarnado y transmitido los mejores valores que existen en el fútbol: la humildad, el respeto, la capacidad de echarse al equipo encima en los momentos difíciles y ceder el protagonismo a sus compañeros en los gloriosos. Lo vamos a echar de menos.
¿Cómo vives el Mundial?
Con mucho interés, viendo partidos que no vería si no fuera un Mundial, como el Japón-Senegal del domingo. Es una forma de descansar magnífica, una pasión al alcance de la mano y una buena excusa para juntarse con amigos.
Si no gana España, ¿cuál es tu otra selección favorita?
Pese a los malos resultados mi otra favorita es Argentina, que es un país y un pueblo al que tengo un cariño especial y con el que mantengo un lazo afectivo muy fuerte. Es mi apuesta como subcampeona en la porra que hice con amigos. También me están gustando Francia e Islandia.
Si te reencarnaras en un jugador, ¿quién te gustaría ser?
Me gustaría ser Isco. Ya me tenía encandilado y me terminé de enamorar de su magia en la final de Cardiff del año pasado. Le deseo grandes éxitos en la Selección también.
¿Qué jugador de fútbol sería Pablo Iglesias?
Bueno, todo el mundo sabe que Pablo es más de baloncesto.
¿En qué se parece la Selección española a Podemos?
A otros les bastará con aplicar el esquema o con salir a cubrir el expediente. Nosotros, como la Selección, necesitamos toda la creatividad, concentración y generosidad para lograr una meta tan hermosa como difícil: ellos ganar un segundo Mundial para todos. Nosotros construir las bases de un país más justo. Creo además que a los dos nos enorgullece ese compromiso.
¿El gol que más te haya impactado de un Mundial?
De España el golazo desde la banda de Goikoetxea en el Mundial de USA 94. De otras selecciones me quedo con el gol imposible de falta de Roberto Carlos en el Mundial de Francia 98.
¿Y qué es lo peor de un Mundial?
Que solo hay uno cada cuatro años, pero si no fuese cada tanto no lo esperaríamos con estas ganas.
¿Te gustaría ser algún día seleccionador de España?
Creo que todos los españoles somos un poco seleccionadores durante unas horas en el bar o viendo lo partidos. Con eso me conformo.
¿A quién le sacarías tarjeta roja en el Congreso?
A la hipocresía, pero se iban a quedar varios escaños vacíos.