Vestida con un palabra de honor de Versace creado especialmente para ella y de la mano de su marido Javier Bardem. Así llegaba el año pasado Penélope Cruz a la gala de los Goya, nominada a Mejor Actriz por su papel en Ma Ma de Julio Medem. Ahora, la actriz española repite nominación después de meterse en la piel de Macarena Granada 18 años después en La reina de España. Fue precisamente su interpretación de Granada la que le dio su primer Goya en 1998 por La niña de tus ojos.
En esta ocasión Cruz ha apostado de nuevo por Atelier Versace, hecho para la ocasión. La abertura de la falda recordaba mucho a aquella tan famosa por la que enseñaba pierna Angelina Jolie en los Oscar de 2012, un diseño también de Versace.
"Tener dos niños te cambia la vida pero la sensación de estar en los Goya siempre es la misma. Siempre es como la primera vez", ha asegurado la intérprete. Cruz ha completado su look con unos pendientes de Chopard.
La de esta edición es la novena nominación de Penélope Cruz, que ya tiene en su poder tres cabezones, el último por Vicky, Cristina, Barcelona, película con la que consiguió ser la primera actriz española en ganar un Oscar. Entre los próximos proyectos de Cruz están dos largometrajes en los que compartirá de nuevo la pantalla con Javier Bardem: Escobar, un relato sobre el narcotraficante Pablo Escobar a las órdenes de Fernando León de Aranoa, y un proyecto todavía sin definir con el oscarizado director iraní Asghar Farhadi.
Penélope Cruz aprovechó su paso por la alfombra roja para denunciar las medidas contra la inmigración de Donald Trump y criticó el silencio del gobierno español al respecto. "Esos niños se están muriendo de hambre y de frío, y me hierve la sangre con el tema", confesaba la actriz madrileña ante los medios de comunicación.