El lujo sostenible, el futuro de la moda
¿Imaginas un bolso fabricado con piel de setas? ¿Unos zapatos de corcho orgánico? Pues ya puedes hacerlo porque la nueva moda sostenible está disponible en el mercado, aunque hay que pagar cientos de euros por ella.
Las multinacionales del lujo, los grandes grupos como Kering, están desarrollando líneas de negocio orgánico, natural, 100% ecológico y biodegradable para el futuro inmediato. Es la moda con conciencia que también llega a las empresas que controlan las marcas del lujo mundial.
El presidente de Kering, Francois–Henri Pinault, concedía una entrevista el pasado mes de diciembre a la agencia especializada Bloomberg en la que explicaba cuál es su visión de los productos de gran lujo en el corto-medio plazo. La multinacional, que cuenta con 16 de las marcas reconocidas mundialmente como premium —entre ellas Gucci,Puma o Yves Saint Laurent—, ya ha comenzado todo un proceso renovador en su línea de producción para evitar los productos y materiales dañinos con el medioambiente.
Dicha transformación, que finalizará en 2020, tiene como filosofía la conversión del nuevo concepto de LUJO en mayúsculas. Una idea que comenzó con la compra de Puma, prácticamente en bancarrota, y que en estos momentos es una de las firmas de ropa y complementos deportivos del nuevo lujo sport chic más importantes del mundo.
El presidente de Kering aseguraba que su director creativo, Jochen Zeitz, le convenció para iniciar el cambio de modelo; decisión que ha sido un éxito. "No se pueden vender productos carísimos que provocan daños irreversibles a nuestro entorno", aseguraba Pinault en la entrevista.
Por supuesto, se dejan de lado algunos productos estrella, como los bolsos de Gucci fabricados con pieles de serpiente pitón. Aunque este no es un animal en riesgo de extinción, Kering apuesta por granjas de estas serpientes y de cocodrilos en Tailandia para que sean realmente sostenibles y los clientes sepan que los animales no sufren durante su muerte. Con estas granjas controlan toda la cadena de suministro y no dependen de que los proveedores les engañen a la hora de comprar las pieles.