Felipe González: "Me siento engañado y frustrado por Sánchez"
Crítico, dolido, preocupado... El expresidente del Gobierno Felipe González ha dejado claro —en la Ser— que "Sánchez no puede hacer un gobierno con 85 diputados y con gente que quiere trocear España", ya que "para eso hay que ganarle a la derecha". "Un gobierno Frankenstein no es posible", ha afirmado Felipe González, quien cree que "es posible un gobierno de coalición pero no cuando se pone en cuestión que España es un espacio compartido".
En este sentido, el expresidente ha asegurado que "hablé con Sánchez después de las elecciones del 26 de junio, y el 29 de junio me explicó que no intentaría un gobierno alternativo y que en segunda votación pasarían a la abstención". Por este motivo, Felipe González se ha mostrado "engañado y frustrado por Sánchez", ya que "ha hecho algo totalmente distinto a lo que me dijo".
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Así mismo, González ha matizado que, después de este episodio, "no he vuelto a hablar con él": "Conmigo, que ha solido hablar de una forma natural, desde el 26 de junio no se ha vuelto a sentar" y si "ha cambiado de posición no se lo ha explicado a nadie y yo no lo entiendo", ha expresado.
DE "DERROTA EN DERROTA"
"Alguno tiene que asumir responsabilidades por ir de derrota en derrota", ha considerado González en referencia a Sánchez, antes de criticar su pelea con Podemos. "Nuestro proyecto es ofrecer una alternativa a ese gobierno que no nos gusta" del PP, ha exclamado González.
No obstante, González no cree que haya un solo "responsable del lío, yo también lo soy". Sin embargo, ha apuntado que la máxima responsabilidad la tiene el secretario general, que "no sé qué estrategia tiene".
"El partido tiene que recuperar su carácter de alternativa", ha afirmado, antes de mandar un recadito a Sánchez: "La opción de dimitir es una opción", ha recalcado González, quien critica que "yo no podré gobernar, pero impido que los demás gobiernen".
En este sentido, González ha recalcado que la posición del Comité Federal "la asume todo el mundo y si el secretario general no la asume, tendrá que dimitir".
"DISPARATE"
González ha explicado que ni PP ni PSOE deben bloquear el gobierno del otro, ya que "para los ciudadanos es un disparate que ls llamen a terceras elecciones que nos podría llevar a una crisis del sistema". Por ello, el expresidente ha opinado que aunque el líder del PP, Mariano Rajoy, es un obstáculo, "no se puede faltar el respeto a 8 millones de votantes": "Rajoy es el único animal que avanza sin moverse, se atribuye la victoria en Galicia", ha ironizado.
De este modo, el expresidente ha afirmado que el PP sabe que Rajoy "es muy mal candidato porque es el inmovilismo personificado", pero el PSOE debe permitir que arranque el Gobierno porque "va a tener que afrontar reformas serias".
"El 20 de diciembre, el 26 de junio y este domingo pasado sacamos los peores resultados", ha matizado, antes de concretar que "hay que felicitar al que gana y construir desde el respeto, no destruir".
PEDIR DISCULPAS
Las reacciones tras las declaraciones de González no se han hecho esperar. UnNo de los primeros en manifestarse ha sido el
presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha considerado que "faltan de entrada disculpas" al expresidente del Gobierno Felipe González y, "por supuesto, algo de claridad" por parte del líder socialista, Pedro Sánchez.
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Page, quien declaró la semana pasada en El Huffington Post que "no tiene sentido que Sánchez llame a los barones y luego los criminalice", también se ha referido a la posibilidad de forzar la salida del secretario general del PSOE y que se haga cargo del partido una gestora, y ha opinado que "sería el último recurso" y que habría que evitarlo "por todos los medios".
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Preguntado también por la posibilidad de que su homóloga andaluza, Susana Díaz, se postule como candidata a la secretaría general del PSOE, ha considerado: "Eso es ir muy lejos, no estamos en ese debate de momento".
No obstante, ha recalcado que todos "saben" su "cariño por Susana", aunque ha apuntado "con mucha rotundidad" que si tiene "alguna responsabilidad" es porque cuando el secretario general del PSOE le "pidió que le ayudara", que usara su "influencia" para "buscarle votos", habló "con muchos militantes, familia y amigos para que votaran a Pedro Sánchez".
El entorno de Sánchez también se ha manifestado sobre las declaraciones de González. Mientras el secretario de Organización del PSOE, César Luena, ha criticado a González por hacer pública una "conversación privada", el portavoz del grupo socialista en el Congreso, Antonio Hernando, ha asegurado que en la dirección socialista "jamás" se formó una posición a favor de la abstención a un gobierno del PP.
