La gran noche de la gastronomía mundial
Eran todo nervios, aunque nada más entrar al salón de eventos de Cipriani en Wall Street (Nueva York), Massimo Bottura sabía que por fin iba a ser coronado como el chef del mejor restaurante del mundo, Ostería Francescana (en Módena, Italia).
Bottura llegó el último y entre aplausos. Preguntado por si creía que iba a desbancar a los hermanos Roca del primer puesto en la cumbre mundial de la restauración, contestó muy serio: "Son los mejores, son mis amigos". Los de Girona cumplen este año tres décadas al frente de Celler de Can Roca, elegido el mejor restaurante del mundo en 2013 y 2015.
En realidad, la lista es tan injusta como todas. ¿Cuál es el mejor restaurante del mundo? Obviamente los diez primeros de la lista se mueven en milímetros y en gustos. "Es obvio que todos son buenísimos", asegura Cristina Jolonch, representante de los 50 Best Restaurants en España y una de las mujeres que más sabe de gastronomía mundial. "Para nostros es un orgullo que tres restaurantes españoles estén entre los diez mejores del mundo".
Cristina se mueve como pez en el agua entre los mejores chefs. "Son mucho más que grandes cocineros. Los nuestros, los españoles, están unidos. Son amigos, comparten experiencias, se ayudan y se apoyan entre ellos. Es fantástico ver cómo entre todos han colocado a España en la cumbre mundial de la gastronomía", dice.
Massimo Bottura, junto a los hermanos Roca
MUCHO MÁS QUE LUGARES DONDE COMER
Tener un restaurante reconocido como uno de los mejores implica la dinamización económica de una zona, la inversión en tecnología y en los mejores productos de la tierra. Supone además poner en valor la restauración, las tradiciones, la cultura y el trabajo de la zona.
El restaurante de Massimo Bottura tiene lista de espera hasta dentro de un año y medio. El Celler de Can Roca tarda exactamente tres minutos en cerrar todas las reservas del mes a través de internet; miles de personas esperan comer las delicias que cocina Joan Roca, designado el mejor chef del mundo según sus propios compañeros.
Sin embargo, no todos los mejores del mundo tienen lista de espera, aunque si son un gran motor para los lugares donde están ubicados. Es el caso de Quique Dacosta y su restaurante de tres estrellas Michelin en Denia. Este joven maestro de la restauración, empezó con quince años fregando platos y hoy es referente mundial. Nuestro país cuenta con siete establecimientos en el listado en el que también se encuentran Mugaritz (puesto 7), el Asador Etxebarri (puesto 10), Azurmendi (puesto 16), el restaurante Arzak (puesto 21), Tickets de Albert Adrià (puesto 29) o Quique Dacosta (puesto 49).
El chef Quique Dacosta
Los hermanos Roca aprovecharon su visita a Nueva York para anunciar la puesta en marcha de su fundación, que estará dedicada a enseñar, compartir y desarrollar proyectos gastronómicos. Su acuerdo con Naciones Unidas como embajadores para "enseñar a aprovechar los alimentos de cada lugar y combatir el hambre y la pobreza a través de la cocina", va viento en popa. Su primer proyecto se desarrolla en Nigeria, con el objetivo de concienciar primero y dar de comer después. El segundo gran proyecto, éste en México, se enfocará en el empoderamiento de la mujer a través de los fogones. Es la cocina con conciencia, la nueva cocina que lideran los mejores del mundo.
La agroalimentación, el turismo y la gastronomía representan el 25% del PIB español. La industria de la alimentación, con una facturación de 93.000 millones de euros, supone el 3% del PIB. Estos datos, citados por el propio Ferran Adrià, ponen de manifiesto lo que significa la gastronomía en España. En 2015 siete millones de turistas vinieron a España sólo para disfrutar de la cocina. El gasto medio de este tipo de turismo, que suele demandar experiencias únicas con calidad, se sitúa en los 1.125 euros por estancia, por encima de lo que gasta el turista normal.