Trucos para diferenciar los espacios de la casa y ganar amplitud
La distribución interior de los hogares del siglo XXI y las nuevas reformas tienden a eliminar los espacios compartimentados para crear ambientes diáfanos en los que distintas áreas comparten una misma superficie. Por este motivo en muchas ocasiones necesitamos contar con alternativas para separar ambientes sin perder amplitud visual.
Dos expertos en interiorismo ofrecen diez propuestas para lograrlo.
1. El uso de listones verticales de madera —o cualquier otro material— es una manera fácil de separar visualmente dos ambientes sin comprometer el estilo decorativo de la estancia. "La anchura de los listones se convertirá en el elemento clave para conseguir una apertura lumínica y visual mayor, de modo que ambos espacios se fundirán o separarán con mayor o menor intensidad", puntualiza Rosa Bramona.
2. Las estanterías divisorias que van de suelo a techo se convierten en una apuesta segura cuando pretendemos separar una zona de la casa sin necesidad de utilizar un tabique.
"La practicidad de este tipo de elementos radica en decidir si configurarlo de forma opaca, añadiendo piezas de mayor volumen en sus estantes que actúan como pantalla, o aligerando y permitiendo la visión entre ambos espacios, mediante el uso de objetos más transparentes o más pequeños", comenta Rosa Bramona. Las estanterías "dejan pasar la luz natural y aportan cierta privacidad al ambiente, además de convertirse en una pieza de almacenaje muy útil", puntualiza la interiorista.
3. "En dormitorios amplios, en los que la zona de descanso y el baño forman parte de una misma superficie global, se extiende cada vez más el uso de muretes de obra bajos como elementos de separación. No impiden el flujo de luz natural de un ambiente al otro y tienen doble funcionalidad: por un lado se utilizan como cabecero y por el otro, mediante unos estantes puede usarse como almacenaje", cuenta Rosa Bramona.
Esta solución resulta especialmente atractiva para separar también la zona de la cama y el vestidor, que puede ubicarse en el reverso del muro-cabecero, construido a media altura.
4. Con la tendencia cada vez más extendida de crear espacios abiertos, también crece la necesidad de aislar sutilmente ciertas zonas, como es el caso del recibidor o la entrada. Para ello, el uso de mobiliario en forma de panel vertical se convierte en uno de los mejores recursos decorativos.
"Añade un estante a ambos lados de la estructura para crear un elemento de apoyo en el que depositar objetos de uso diario como las llaves o la correspondencia. Sumarás utilidad al elemento separador", afirman desde Standal Interiorismo.
5. Uno de los recursos más económicos para diferenciar dos ambientes sin tener que realizar obras —y además por poco dinero— es utilizar la pintura como elemento diferenciador.
"Utiliza dos gamas de color muy distintas para enmarcar el ambiente en el que pretendes aportar un protagonismo mayor. Aunque no se trata de una separación de espacios como tal, conseguirás una visual claramente diferenciada entre las dos zonas que comparten una misma superficie, además de resultar una idea decorativa muy original", comentan desde Standal Interiorismo.
6. Instalar un cerramiento acristalado con cuarterones puede resultar una solución ideal para dotar de luminosidad cualquier espacio que carezca de ventanas, además de separar los ambientes.
"Mediante el uso de anclajes ocultos en el suelo y el techo de paneles acristalados se consigue independizar dos zonas sin quitar profundidad y luminosidad al ambiente que queda situado en el interior", comentan desde el departamento de interiorismo de Standal. "Si además utilizas dos tipos de pavimentos totalmente distintos para el suelo de cada espacio, conseguirás mayor diferenciación entre ambos", añade Rosa Bramona.
7. Si cuentas con un espacio a diferente altura, distribuye los ambientes en distintos planos. Conseguirás crear cierta independencia entre cada zona, como en este caso, en el que el salón se ubica en la parte más baja y el comedor y la cocina, en la superior, tan solo separados por tres escalones.
"En muchas ocasiones solamente es necesario una pequeña diferencia de altura para conseguir una división visual evidente, por lo que cada espacio adquiere unas características independientes, en la misma superficie global", apunta Standal Interiorismo.
8.En espacios de dimensiones especialmente reducidas se pueden aplicar ideas ligeras y decorativas como es el caso de las cortinas o caídas de flecos, un medio socorrido y muy económico para crear un juego de perspectiva y profundidad sutil.
"Dependiendo de la opacidad que quieras conseguir, puedes elegir entre cortinas tupidas o visillos más ligeros, con transparencia, totalmente tensados gracias a los raíles situados a techo y suelo o simplemente con la caída natural del tejido, a modo de cortina que podrás abrir y cerrar cuando lo necesites", comenta Rosa Bramona.
9. Los cerramientos inspirados en los paneles japoneses, elemento de partición esencial en la cultura nipona, pueden también adaptarse a los hogares de estilo occidental.
"Al añadir capas de papel o cristal traslúcido a las puertas correderas se consigue multiplicar la opacidad cuando los diferentes paneles se pliegan sobre sí mismos, dejando los ambientes aislados o prácticamente integrados, gracias a la estructura perimetral que lo soporta, anclada de suelo a techo", explican desde Standal Interiorismo.
10. La practicidad no está reñida con la creatividad. Utilizar elementos de carácter orgánico y vegetal para crear una sutil separación entre dos ambientes aportará dinamismo. Además, tendrás un sugerente elemento decorativo vertical.
"El uso de plantas de interior de generosas dimensiones (bambús, ficus o sansevieras) en soportes perfectamente alineados marcarán una separación ideal para espacios de corte contemporáneo, en los que la vegetación se convierte en una pieza decorativa esencial", detalla Rosa Bramona.