El mercado de segunda mano, un negocio en auge
Las tiendas de segunda mano proliferan como setas por Estados Unidos en general y las grandes ciudades en particular. Se trata de un movimiento con conciencia y que tiene también su parte económica.
Estos establecimientos son una expresión más de lo que se nos viene encima. A medida que la revolución de la tecnología penetra más profundamente en la vida moderna, los empleos, modelos de negocio, las costumbres sociales y de consumo están siendo sustituidos por un modelo productivo basado en el conocimiento. Lo que se inició con el reciclaje de muebles llega tres décadas después a la moda.
"La primera generación que abrazó el concepto de reciclaje como forma de vida —y sin tener que renunciar al lujo— fue la que empezaba a consumir a principios de este milenio", asegura Beatrice Rangel, de Amla Consulting. "La conciencia ambiental a principios del milenio les llevó a abrazar el concepto de reciclaje como medio para proteger la naturaleza y retrasar el agotamiento de los recursos naturales. Pero a medida que internet comenzó a transformar todos los aspectos de la vida moderna, el reciclaje se convirtió en modelo de negocio. El ejemplo clásico es eBay", apunta Rangel.
En menos de dos generaciones se ha pasado de los mercadillos a denominar este tipo de compras como vintage y de conseguir productos de alta calidad —desde vajillas o muebles a ropa de marca de superlujo— al gran mercado mundial del reciclaje.
Mercado de segunda mano en Brookly, Nueva York (Estados Unidos).
Las primeras investigaciones sobre este sector apuntan a que la industria de segunda mano en Estados Unidos tiene unos ingresos anuales de aproximadamente 16 millones de dólares (unos 14 millones de euros), incluidos los ingresos de las tiendas de antigüedades, que suponen el 13% del total.
Las denominadas industrias de buena voluntad, o empresas que se dedican a revender objetos de segunda mano, movieron en 2013 la friolera de 5.100 millones de dólares (4.569 millones de euros) en ventas al por menor, en aproximadamente 2.900 puntos de venta.
Según America's Research Group, una consultora especializada en consumo, entre el 16% y el 18% de los estadounidenses compra en una tienda de segunda mano al menos una vez al año. Las tiendas de consignación/reventa suponen entre el 12% y el 15% del mercado.