31 situaciones graciosas que sólo los dueños de gatos entenderán
1. Cuando tu gato toma decisiones ilógicas como ésta.
2. Cuando el nuevo y flamante equipamiento que le acabas de comprar sigue sin ser lo suficientemente bueno.
3. Cuando tu gato se niega a aprender a utilizar la caja de arena.
4. Cuando cada día de tu vida empieza así.
5. Cuando tus muebles son asesinados (con alevosía).
6. Cuando el momento de la ducha viene con un atento (e incómodo) público.
7. Cuando empiezas a encontrarte pelos de gato en los lugares más desagradables.
8. En serio, está por TODAS partes.
9. Cuando a la primera de cambio te recibe con su intensa mirada.
10. Cuando a diario te encuentras el papel higiénico masacrado.
11. Cuando intentas ser cariñoso y te arrepientes casi de inmediato.
12. Cuando tu gato trata de emular el último espectáculo del Circo del Sol.
13. Cuando tu colada se convierte en el patio de recreo de tu gato.
14. Cuando te das cuenta de que no hay nada a salvo si él está de por medio. Ni siquiera la cena.
15. Cuando tu gato calcula mal su capacidad de meterse en una caja.
16. Cuando se pone boca arriba y te engaña para que te atrevas a arriesgar tu vida y acariciarlo.
17. Cuando hay comida de gato en todas partes menos en su bol de la comida.
18. Cuando tus chanclas son víctima de un castigo cruel e inaudito.
19. Cuando la hora del juego se convierte en algo personal.
20. Cuando te sientes observado todo el tiempo.
21. Cuando no puedes comer nada a gusto sin que te haga sentir culpable.
22. Cuando tu gato se muestra completamente insensible a tu dolor y sufrimiento.
23. Cuando aprendes por las malas que ninguna planta está a salvo en tu casa.
24. Cuando tu gato piensa que pasar la mopa es un juego tonto.
25. Cuando te deja claro quién es el rey del lugar (y resulta que no eres tú).
26. Cuando la repisa de la ventana se convierte en un rincón privilegiado.
27. Cuando tu gato se niega a dejar que termines tus cosas.
28. Cuando ocupa todo el sofá.
29. Cuando al final acepta acurrucarse, pero en realidad la postura es de lo más rara e incómoda.
30. Cuando cualquier bolsa de papel le sirve como entretenimiento durante horas.
31. Cuando tu gato se hace adicto a los rayos del sol.
Este artículo fue publicado originalmente en la sección Comedy de la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés.