Los peores consejos de belleza de Internet
Tú, que le reprochas a tu abuela que se crea todo lo que anuncian en la teletienda, deberías aprender y aplicarte el cuento: Internet, así en general, no es la solución definitiva a todos tus problemas. Bien por las recetas saludables, los entrenamientos para hacer en casa o los trucos de los expertos a nuestro alcance. Pero cuidado: también hay consejos (sobre todo en el mundo de la belleza) que no siempre funcionan y que oscilan entre lo estúpido y —aquí el drama— lo peligroso.
Estos son solo algunos ejemplos, los más comunes, para que no vuelvas a caer caigas en ellos:
• Utilizar laca para fijar el maquillaje: un fijador es una herramienta que permite que el maquillaje permanezca en su lugar durante más tiempo, pero sustituirlo por laca para el pelo no es una buena idea. Aparte de dejar una sensación incómoda sobre la piel, la laca obstruye los poros y perjudica el estado de tu rostro.
• Crema anti-hemorroides para suavizar las bolsas de los ojos y las ojeras: Ojito, porque este se ha extendido como truco de celebrity… Se aprovechan de las propiedades vasoconstrictoras de la crema, pero se obvia que suelen ser bastante oleosas, comedogénicas (bloquean los poros) e irritan la piel sensible porque, evidentemente, no están hechas para eso.
• Pellizcar las mejillas para un rubor natural: tan natural como el romper los capilares de la piel. Vale que, en el pasado, no todo el mundo podía permitirse comprar colorete, pero ahora existen marcas para todos los bolsillos. No caigas en el peligro de autolesionarte para lucir mejor.
• Fabricar bronceador con aceite de oliva o Coca-Cola: el aceite de oliva nutre la piel, sí, pero si lo usas mientras tomas el sol, te fríes. Literalmente. No tiene protección solar y aumenta la incidencia de los rayos de sol en la piel al provocar efecto lupa. Con el refresco de cola hubo furor hace unas décadas porque daba tono a tu piel desde que lo aplicabas… Una locura.
Yo me bronceo.
• Utilizar quitaesmalte para secar granitos: en serio, ¿quién, en su sano juicio, querría ponerse en la cara algo que está hecho para disolver el esmalte de uñas? Pues hay locos por ahí que lo hacen, confiando en el poder secante del producto. ¡Y claro que seca la piel! En exceso, además; y puedes sufrir una grave irritación como premio final. ¡Sorpresa!
• Cambiar la cera caliente por azúcar derretido: esta es una de las cosas más peligrosas que encontrarás en la lista. Las quemaduras que puedes sufrir serían gravísimas… Ni lo intentes; ¡es más! Ni siquiera te lo imagines, por tu propia seguridad.
• Hacer mascarilla casera con arena de gato: esta locura no tiene gran explicación, pero algunos argumentan que contiene silicio, igual que muchos productos para pieles grasas. Hasta ahí, vale, pero ¡¿y todo lo demás?! Como los químicos empleados para disimular los malos olores que, entre otros ingredientes, pueden causar reacciones alérgicas bastante peligrosas.