Sólo tres de los 58 detenidos por los abusos sexuales en Colonia son refugiados
Hubo quien señaló a los refugiados como responsables de las agresiones sexuales masivas que se produjeron en Nochevieja en Colonia. Tras los abusos, se incrementaron los ataques racistas en Alemania y los ciudadanos cambiaron notablemente su percepción sobre la política de puertas abiertas a los solicitantes de asilo que puso en marcha Angela Merkel, según un barómetro político que realizó la cadena de televisión pública ZDF. Más de un mes después se empiezan a tener datos: sólo tres de los 58 detenidos son refugiados de Irak o de Siria.
Según informaciones de la policía alemana recogidas por el diario The Independent, solo tres de las 58 personas arrestadas habían llegado recientemente de Siria e Irak. La mayoría de los sospechosos eran de origen argelino o marroquí y tres de ellos eran alemanes, según el fiscal de la acusación Ulrich Bremer. En una entrevista en el periódico alemán Die Welt, Bremer ha señalado que de las 1.054 denuncias que se hicieron, 600 están conectadas con robos y no con agresiones sexuales.
A pesar de ello, una ola de acusaciones a los refugiados tras los ataques llevó a que el clima en el país se tensase. Según la encuesta de la televisión pública realizada entonces, un 60% de los alemanes opinaban que su país no podía hacer frente a la llegada de tantos refugiados. La misma encuesta un mes antes los situaba en un 46%. En enero, el Gobierno endureció las leyes de inmigración, incluyendo Argelia, Marruecos y Túnez en una lista de países seguros, por lo que será poco probable que los ciudadanos de esos países consigan asilo.
MARCHAS ANTI-INMIGRACIÓN EN TODA EUROPA
Además, el nuevo jefe de policía de la ciudad, Jurgen Mathies, dijo que la técnica de acorralar a las mujeres y separarlas de sus amigos no se ha visto nunca en Alemania y parece haber venido de países en los que "deben estar familiarizados con estos comportamientos".
Desde entonces, los grupos de extrema derecha con el movimiento islamófobo Pegida al frente, se han centrado en incrementar los sentimientos de desconfianza hacia los refugiados y Pegida ha usado estos ataques para organizar marchas anti-inmigración en toda Europa.
Las autoridades alemanes hicieron un plan preventivo contra abusos para las fiestas de Carnaval. Las calles se llenaron de un despliegue especial de operativos policiales y la organización del evento hizo una guía específicamente dedicada a informar a los refugiados sobre cómo comportarse en Alemania. En él se informaba, entre otras cosas, de que "en Alemania, cuando dos personas se saludan se dan las buenas tardes y se miran a los ojos,no se dan palmadas en el trasero a las mujeres y tanto hombres como mujeres pueden elegir libremente con quien forman pareja o qué religión practican".