30 años de Premios Goya en nueve gráficos
Érase una vez una noche de marzo en la que lo más granado del cine español se daba cita en el Teatro Lope de Vega de Madrid para una entrega de premios presidida por los reyes Juan Carlos y Sofía. Corría el año 1987 y la gala, en la que Fernando Fernán-Gómez fue el ganador sin estar presente, suponía el nacimiento de los Goya.
De eso se cumplen 30 años y en unas horas los Goya, ya plenamente consolidados, soplarán las velas en el Centro de Congresos Príncipe Felipe de la capital. Dani Rovira será el maestro de ceremonias de una noche en la que 143 películas optan a alguna de las 28 categorías —sin contar el Goya de Honor, que recogerá Mariano Ozores—.
Los premios más importantes del cine español han dado para muchas anécdotas y momentos para la posteridad, desde el No a la guerra, el robo de un cabezón durante 24 horas o el rap de Resines. Sin embargo, también suponen una radiografía del estado de la industria año a año. Condensamos algunos de los datos más relevantes que han dejado estos 30 años de Premios Goya en nueve gráficos:
Ninguna película ha conseguido igualar el éxito de Mar Adentro, que en 2005 cosechó 14 premios Goya. La siguiente película más premiada es ¡Ay, Carmela!, con 13 en 1991, mientras que el bronce lo comparten Blancanieves (2013) y La isla mínima (2015), con 10 estatuillas cada una. ¿Conseguirá La Novia, con sus 12 nominaciones, subir a este podio el día 6?
Como curiosidad, sólo tres películas han hecho manita logrando los cinco principales premios (Mejor película, director, guión, actor y actriz): las ya citadas ¡Ay, Carmela! y Mar Adentro más Te doy mis ojos, que lo consiguió en el año 2004.
Los géneros en cine son una cuestión muy amplia y sujeta a interpretaciones; de hecho una misma película puede tocar varios.
Dicho esto, al tener en cuenta el género predominante en las 29 ficciones ganadoras del Goya a la Mejor película, se puede observar que el drama es el que más veces ha sido premiado (así ha sido en 14 ocasiones), mientras que la comedia y el thriller van casi empatados: ocho frente a siete.
La persona que más vitrinas necesita para guardar sus Goyas es el compositor Alberto Iglesias, que atesora una decena de cabezones, todos a la Mejor música original. En esta edición podría sumar uno más por su trabajo en Ma ma.
También podría sumar uno más a sus nueve Reyes Abades por los efectos especiales de Tiempo sin aire. No es el caso de Alejandro Amenábar, empatado en el ranking con Abades, al no haber conseguido ninguna nominación este año con Regresión.
Sin embargo, el polifacético Amenábar sí puede presumir de haber conseguido Goyas en cinco categorías distintas: película, guión, dirección, dirección novel y música original. Hay recuentos que le dan 11 Goyas en lugar de nueve al haber sido elegidas como Mejor película tanto Tesis como Los Otros, pero como confirma la Academia de Cine, no es así. Él no era el productor, por lo que esos galardones recayeron en Las producciones de El Escorpión, de José Luis Cuerda, y Sogecine.
Ninguna película ha logrado tantas nominaciones en la historia de los Goya como Días contados en 1995, que consiguió 19. Sin embargo, ese dato no se tradujo después en premios: se llevó ocho. Desigual fortuna tuvieron las siguientes con más candidaturas, Blancanieves y La niña de tus ojos, que optaron a 18 premios. La primera se llevó 10 cabezones mientras que la segunda, siete.
Pese a ser uno de los personajes más internacionales de nuestro cine, Pedro Almodóvar no tiene el mismo reconocimiento en los Goya. Pese a logar un elevado número de nominaciones, 16 conMujeres al borde de un ataque de nervios y otras 16 con La piel que habito, en total sólo se llevó nueve premios (cinco por la primera y cuatro por la segunda). El mayor batacazo se lo pegó con ¡Átame!, con la que en 1991 logró 15 nominaciones que no se materializaron en ningún premio.
Son dos los actores cuyo nombre ha aparecido más veces en las listas de nominados a los Goya: Juan Diego y Eduard Fernández. De las nueve ocasiones con las que ha contado cada uno, el primero se alzó con tres premios y el segundo, con dos.
Javier Bardem es el actor que atesora un mayor número de Goyas (cuatro como protagonista y uno revelación). En esta edición tanto Tosar como Javier Cámara podrían sumar una estatuilla más a su colección.
Maribel Verdú es la vencedora absoluta en el top de actrices con mayor número de opciones a haber ganado un Goya con 10 nominaciones (de las que sólo dos acabaron en premio). La única de esta lista que nunca ha subido al escenario a recoger la estatuilla es Ángela Molina, pese a haber estado nominada en cinco ocasiones.
Quien este año podría sumar un Goya a su haber es Penélope Cruz si resulta ganadora por su papel en Ma ma. Pese a que no figura entre las más nominadas, sólo Laia Marull ha conseguido un Goya de cada una de las tres categorías de interpretación: Mejor actriz, mejor interpretación femenina de reparto y actriz revelación.
Pedro Almodóvar es indiscutiblemente quien más veces ha tenido el Goya a su alcance en la categoría de Mejor dirección: ocho. Sin embargo, sólo se lo llevó a casa por Todo sobre mi madre (1999) y Volver (2006).
El más efectivo en este apartado es Alejandro Amenábar ya que de sus cinco candidaturas, tres acabaron en premio.
Al repasar el listado de las 29 producciones ganadoras del Goya a la Mejor película hasta la fecha hay un dato que salta a la vista: la gran mayoría han sido dirigidas por hombres. Sólo dos directoras han conseguido hacerse un hueco: Icíar Bollaín en 2004 con Te doy mis ojos e Isabel Coixet dos años después con La vida secreta de las palabras.
En esta 30ª edición de los Goya podría ganar una mujer. Coixet podría repetir si Nadie quiere la noche es elegida como la mejor película o Paula Ortiz podría estrenarse en este apartado si la ganadora es La Novia.
Al igual que en el apartado anterior, Paula Ortiz e Isabel Coixet también podrían sumar una figurita rosa a este gráfico si el día 6 son las ganadoras en la categoría de Mejor dirección. Hasta el momento, las únicas mujeres que han recogido este premio han sido Pilar Miró en 1997, Icíar Bollaín en 2004 y la propia Coixet en 2006.