Ideas para salirse de la clásica cena de Navidad de empresa
Ha llegado el momento, estamos ya en las temidas semanas antes de Navidad. Eso significa que también está cerca el día en que tendremos que vernos con el jefe después de la jornada para la cena de empresa.
Las cenas de Navidad del trabajo y la organización de un evento empresarial suelen ser un rollo, incluso un mal trago. Muchas veces toca sentarse durante más de dos horas seguidas junto al compañero con el que no nos acabamos de entender y en ocasiones hay que soportar al de tres mesas más allá dándonos la brasa sin parar.
Sin embargo, la fiesta de Navidad de la oficina no tendría por qué ser así. Podría ser más ágil, más divertida y mucho menos coñazo encorsetada. Si quieres darle un giro a la de este año, sigue esta serie de consejos y haz algo diferente.
CAMBIA LA HORA
Seguro que todos esperan tener que sacrificar su tiempo libre para ir a la fiesta. ¿Y si, en vez de por la tarde-noche, es un desayuno brunch? ¿O un almuerzo para después tener la tarde libre?
Sea lo que sea, lo importante es encontrar un restaurante perfecto para un evento de este tipo y hacer la reserva rápidamente.
AMIGO INVISIBLE
Es algo muy típico, pero si la empresa es pequeña puede ayudar a romper el hielo antes de ponerse a llenar el buche. No hace falta romperse el coco, con una taza, un muñeco o un peluche vale. (Al que le toque el jefe... lo sentimos mucho).
NO HACER MESAS
Hagas lo que hagas, esta es una regla fundamental: nunca hagas mesas donde los empleados no pueden controlar con quién les toca sentarse o con quién tienen que hablar durante toda la noche.
Si la empresa es pequeña, sentaos todos en la misma mesa; si es grande, la opción más segura es un cóctel, todos de pie.
TEMÁTICA
Una buena forma de que la gente se lo pase bien y tenga de qué hablar: que todos vayan disfrazados de la misma temática. Fiesta de piratas, hawaiana, de terror, de los años 50... Todo vale y todo puede ser divertido. Si el jefe va el más currado, se apunta el doble de tantos.
PREMIOS TONTOS
Es un buen momento para reconocer que todo el mundo tiene su papel. Reparte hojitas para votar las categorías más absurdas, desde El Que Más Traga hasta El Que No Sabe Hacer Fotocopias. Nunca, en ningún caso, premios al Mejor Empleado.
UN REGALO PARA TODOS
Si eres el jefe, estírate un poco y cómprale a todo el mundo un regalito tonto o un "vale por...". Todos queremos recibir regalos en Navidad, ¿no? Si los dejas envueltos y tienen que escoger uno cada uno, aún mejor, siempre que todos tengan el mismo valor.
JUEGOS DE MÚSICA
No nos referimos a las sillas, pero puedes proponer bailes en los que haya que cambiar de pareja cuando se apaga o cambia la melodía, una conga, un can can...
SELFIE DE GRUPO
Sacarse selfies rompe mucho el hielo. Si el jefe pone caras, será aún más divertido.
FOTÓGRAFO PROFESIONAL
Contrata a un fotógrafo profesional que vaya por toda la fiesta sacando fotos divertidas y retando a los demás a posar de forma graciosa. Al siguiente día de trabajo, que toda la oficina las vea en grupo y se ría. Hay que hacer una criba previa para que no haya nada excesivamente avergonzante.
UN PICNIC
En vez de la formalidad de sentarse a una mesa, haced cestitas de comida y montad un banquete más informal. Puede organizarse hasta en la oficina, aunque lo mejor es cambiar de aires: un parque, si la empresa es pequeña, será perfecto.
DE CAÑAS
¿Por qué hay que comer, pudiendo beber? La sana tradición española de tomar cañas es mucho mejor para disolver la tensión del ambiente laboral. A la tercera ronda seguro que te empieza a caer bien incluso ese que no soportas que se sienta enfrente.
A LA BOLERA
Los bolos son divertidos, un poco competitivos y, como hay tiempo entre los turnos, todos se pueden relajar con una cerveza y charlando con los demás jugadores que esperan que les toque, riéndose de quien lo hace mal, celebrando un buen lanzamiento...
UN PAINTBALL
Ayudará a sacar la agresividad de la jornada y desfogará a todos para que vuelvan suaves el lunes. El jefe debe asumir que al principio será cooperativo y el objetivo será él.
FIN DE SEMANA DE RELAX
En EEUU hacen retiros así: todo el mundo va a un balneario o una casa rural a relajarse. En España, es conveniente que se pueda llevar pareja y no agobiar con actividades todo el día.
HAGÁIS LO QUE HAGÁIS... ¡LUEGO KARAOKE!
Aunque hagas la típica cena, nadie olvidará lo que viene después: un karaoke donde todos puedan perder la vergüenza y reírse de los demás. Imprescindible una intervención del jefe.