Croquetas. Muy pocos se resisten a este manjar. El plato de origen francés (¡sí, son francesas! ¿O no te habías dado cuenta por su nombre?) cosecha miles de fans en toda España y parte del extranjero. Los hay que sólo quieren las de su abuela, los que están dispuestos a probar los sabores más locos y los que no son capaces de resistirse ni ante una bandeja de congeladas.
Sin embargo, hacer unas croquetas no es tarea fácil. El plato tiene truco y Chicote se encargó de revelarlo en su Twitter hace un par de años. Ahora de lo que se trata es darle una vuelta de tuerca al asunto y cambiar el clásico jamón (o pollo, o carne picada...) por otros productos más originales aunque igualmente apetecibles.
En esta selección de recetas podrás comprobar que hay vida más allá de los clásicos. En las croquetas vale todo: desde la calabaza y queso hasta la morcilla de Burgos o los grelos y el pulpo.
Sólo hay que echarle un poco de imaginación y ponerse manos a la obra.
Parecen unas típicas croquetas, pero este plato no se sirve como entrante. ¡Estas croquetas se llevan a la mesa a la hora del postre!
Puedes ver la receta en Cookpad.