La Fiscalía pide que se anule la sentencia sobre el Prestige por la existencia de pruebas contra el capitán

La Fiscalía pide que se anule la sentencia sobre el Prestige por la existencia de pruebas contra el capitán

GTRES

El fiscal ha pedido este martes al Tribunal Supremo que anule la sentencia del hundimiento en 2002 del buque Prestige frente a Galicia, y que la Audiencia de A Coruña dicte otra que tenga en cuenta documentos que prueban que su capitán debe ser condenado y pide que se reconozcan indemnizaciones por 4.328 millones de euros.

La sentencia absolvió a los tres acusados en el caso: el capitán, el jefe de máquinas, Nikolaos Argyropoulos, y el exdirector general de la Marina Mercante, José Luis López Sors. Se les imputaban delitos contra el medio ambiente, daños en espacios naturales protegidos y daños por el hundimiento del petrolero griego frente a Galicia.

La única condena fue para el capitán Mangouras, a nueve meses de prisión por un delito de desobediencia, al no atender las órdenes de las autoridades españolas respecto al remolque del buque.

Luiz Navajas, el fiscal, ha asegurado este martes, en una vista celebrada en el Tribunal Supremo de los doce recursos contra la sentencia, que ésta fue "ilógica, errónea y arbitraria", ya que el Ministerio Público aportó en el juicio documentos que acreditan que el capitán, Apostolos Mangouras, conocía el mal estado del barco.

La Fiscalía pide ahora que se revise el caso y sean reconocidas indemnizaciones por 4.328 millones de euros. Navajas ha destacado las repercusiones económicas de los hechos para entidades y personas, y entiende que "el prestigio de España como Estado que defiende sus costas y riqueza económica quedó en entredicho con la sentencia".

DAÑOS EN EL INTERIOR DEL BARCO

El 19 de noviembre de 2002, tras seis días a la deriva frente a Finisterre (extremo noroccidental de España), el Prestige, que operaba bajo bandera de Bahamas, se partió en dos y se hundió, provocando un vertido de más 67.000 toneladas de fuel que anegó las costas de Galicia y afectó a más de 1.700 kilómetros de litoral, desde Portugal hasta Francia.

La marea negra que produjo provocó una importante movilización social, tanto en Galicia como en el resto de España, con miles de personas limpiando las costas, además de críticas al Gobierno por la gestión de la crisis.

La Fiscalía ha llamado la atención ahora sobre cinco documentos, entre ellos uno escrito de puño y letra por Mangouras, en el que reconoce que había detectado en un mamparo interior del barco, entre los tanques dos y tres, "fisuras y corrosión". La nave se partió en dos precisamente en ese punto.

Entre los papeles cuya valoración reclama se encuentra también la renuncia del precedesor de Mangouras al mando de la nave, el capitán Costazos, por considerar que el barco resultaba "ingobernable". En opinión del Ministerio Público, estas pruebas son suficientes para apuntar una condena a Mangouras por delitos contra el medio ambiente y daños.