Perros glotones pillados in fraganti
A los perros les encanta hacer felices a sus dueños, y se muestran siempre leales y dispuestos a recoger una pelota, dar un paseo o echarse una siestecita. Pero tienen un amor secreto más allá de los humanos, que despierta sus deseos más primitivos. ¡La comida!
¿Qué hace un perro cuando ve a una persona comer? Pues le dedica una mirada atenta al plato con cara de deseo irrefrenable hasta que el comensal se gira, entonces se lanzan a por la comida para después pasar a disimular mirando al techo o al suelo con cara de no haber roto un plato (o no habérselo comido). Solo les falta soltar un silbido o levantar el periódico en un intento de no llamar la atención.
El vídeo de arriba recopila una selección de estos divertidos momentos que hacen querer más aún a estas bolitas de pelo.