La genética de los vascos está presente en los mayas, según un estudio
Un estudio de la Universidad de Oxford, en Reino Unido, ha encontrado las huellas genéticas de la trata de esclavos y la colonización de América hace cientos de años. La mayoría de la ascendencia europea en las poblaciones hispanas/latinas de América continental procede de los españoles, con una pequeña pero distinta contribución genética de los vascos en poblaciones continentales de América del Sur, incluyendo los mayas en México.
El origen genético europeo más común en los afroamericanos y los barbadenses viene de Gran Bretaña, según esta investigación realizada mediante la comparación de los genes de los actuales norteamericanos y sudamericanos con las poblaciones africanas y europeas. El equipo, que incluyó a investigadores de la University College London (UCL), en Reino Unido, y la Universitá del Sacro Cuore de Roma, Italia, analizó más de 4.000 muestras de ADN recogidas de 64 poblaciones diferentes, que abarcan múltiples localizaciones en Europa, África y las Américas.
"Podemos ver el enorme impacto genético que la trata de esclavos tuvo sobre las poblaciones americanas", subraya uno de los investigadores, Garrett Hellenthal, del Instituto de Genética de UCL."La mayoría de los afroamericanos tienen ascendencia similares a los Yorubas en África occidental, lo que confirma que la mayoría de los esclavos africanos vinieron de esta región", añade.
Y continúa: "En las zonas de las Américas históricamente bajo el dominio español, las poblaciones también tienen ascendencia en relación con lo que es ahora Senegal y Gambia. Los registros muestran que alrededor de un tercio de los esclavos enviados a la América española en el siglo XVII vino de esta región y podemos ver muy claramente esta evidencia genética en los americanos actuales".
Estos hallazgos genéticos también descubren la migración previamente desconocida. "Encontramos una contribución genética clara de los vascos de hoy en los mayas de hoy en día en México", apunta el profesor de la Universidad de Oxford Cristian Capelli. "Esto sugiere que el euskera también participó en la colonización de las Américas, llegando con los conquistadores españoles o en oleadas posteriores de la migración".
"Las diferencias de ascendencia europea entre la población de las islas del Caribe y del continente estadounidense que encontramos también se desconocían previamente. Es probable que estas diferencias reflejen distintos patrones de migración entre el Caribe y América continental. Estos resultados muestran cómo de poderoso puede ser un enfoque genético cuando se trata de descubrir patrones ocultos de ascendencia. Esperamos usar el mismo método para buscar otras poblaciones con diversas contribuciones genéticas, como los brasileños", concluye Capelli.
DONANTES Y RECEPTORES
Dado que la migración ha fluido en general de África y Europa a las Américas en los últimos cientos de años, el equipo comparó los "donantes" de África y las poblaciones europeas con las poblaciones "receptoras" americanas para rastrear desde dónde vinieron los antepasados de los actuales norteamericanos y sudamericanos. "Hemos encontrado que el perfil genético de los estadounidenses es mucho más complejo de lo que se pensaba", afirma el líder del estudio, el profesor Cristian Capelli, del Departamento de Zoología de la Universidad de Oxford.
Las islas caribeñas de Puerto Rico y la República Dominicana son genéticamente similares entre sí y distintas de las otras poblaciones, lo que probablemente refleja un patrón de migración diferente entre el Caribe y América continental. En comparación con los sudamericanos, los que viven en los países del Caribe (como Barbados) tuvieron una contribución genética más grande de África.
Los antepasados de los actuales Yoruba de África Occidental (uno de los mayores grupos étnicos de África) realizaron la mayor contribución de los genes procedentes de África a todas las poblaciones americanas actuales. La proporción de ascendencia africana varía en todo el continente, desde prácticamente cero (en el pueblo maya de México) al 87 por ciento en los actuales habitantes de Barbados.
Los habitantes del sur de Italia y Sicilia también proporcionaron una contribución genética europea significativa a Colombia y Puerto Rico, en línea con la historia conocida de los emigrantes italianos a las Américas a fines del siglo XIX y principios del siglo XX. Uno de los grupos afroamericanos de Estados Unidos tenía ascendencia francesa, de acuerdo con la histórica inmigración francesa en el colonial sur de Estados Unidos.
La proporción de genes de Europa frente a las fuentes africanas varió considerablemente de un individuo a otro dentro de las poblaciones receptoras. El equipo de investigación analizó muestras de ADN recogidas de personas en Barbados, Colombia, República Dominicana, Ecuador, México, Puerto Rico y afroamericanos en Estados Unidos y empleó una técnica llamada análisis basado en el haplotipo para comparar el patrón de genes en estas "poblaciones beneficiarias" con llas poblaciones donantes en las zonas de América a donde fueron los migrantes.
"En primer lugar, agrupamos subconjuntos de personas en África y Europa que eran genéticamente similares y utilizamos esta resolución para encontrar qué combinaciones de estos grupos resultaron en la tipo de mezclas que ahora vemos en las personas a través de las Américas", relata el autor del estudio, Francesco Montinaro, del Departamento de Zoología de la Universidad de Oxford.