Crisis en Ucrania: Kiev acusa a Rusia de incumplir los acuerdos de paz de Minsk
Ya lo dijeron el presidente francés, François Hollande, y la canciller alemana, Angela Merkel: el acuerdo de paz de Minsk alcanzado el jueves pasado, después de 15 horas de negociación con Vladimir Putin (Rusia) y Petró Poroshenko (Ucrania), era frágil. Poco después de que comenzara el alto el fuego establecido para el 15 de febrero, los dos frentes ya se estaban acusando de haberlo roto. Ucrania ha acusado este martes a Rusia y a los separatistas prorrusos de incumplir los acuerdos al lanzar una ofensiva contra la localidad de Debáltsevo, en la región oriental ucraniana de Donetsk.
"Lamentablemente, ni Rusia ni las llamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk cumplen los acuerdos" alcanzados el 12 de febrero en Minsk, denunció Valeri Chali, jefe de la Administración Presidencial ucraniana, en rueda de prensa. Chali advirtió de que el incumplimiento del alto el fuego "conducirá a una mayor escalada (del conflicto) y, evidentemente, a un giro en la situación".
"Con el apoyo de Rusia, los guerrilleros quieren, de hecho, cercar Debáltsevo y de esa forma impedir cualquier posibilidad de cumplimiento de esos acuerdos", destacó. Y apeló a los participantes en la cumbre de Minsk -Alemania, Francia y Rusia, además de Ucrania- y también a la Unión Europea, la OTAN y la ONU, a entender que "la escalada amenaza no sólo la integridad territorial y la soberanía de Ucrania, sino la seguridad de Europa (...) y del mundo".
El alto cargo también instó a los países miembros de la OSCE, garante de los acuerdos, a que emitan una "firme protesta" por el bloqueo prorruso a la labor de la misión especial de esa organización en la zona de conflicto. Los portavoces separatistas negaron de inmediato las acusaciones con el argumento de que Debáltsevo es territorio rebelde y, además, recordaron que ni siquiera fue mencionado en los acuerdos de paz.
OFENSIVA SOBRE DEBÁLTSEVO
Las milicias prorrusas lanzaron hoy una ofensiva para tomar "en cuestión de horas" Debáltsevo, estratégica ciudad situada a medio camino entre los principales bastiones insurgentes, las ciudades de Donetsk y Lugansk. "Creo que en cuestión de horas, máximo al final del día, habremos despejado completamente Debáltsevo", aseguró Vladímir Kónonov, jefe del mando militar separatista, a la televisión rusa.
Los rebeldes aseguran controlar ya parte de la ciudad, en particular la estación ferroviaria situada en la periferia de Debáltsevo, pero reconocen que los soldados ucranianos están ofreciendo una feroz resistencia. Los líderes de los cuatro países que participaron en la cumbre de Minsk abogaron por iniciar hoy, martes, la retirada prevista del armamento pesado durante unas consultas telefónicas a cuatro bandas mantenidas anoche.
En cambio, el incumplimiento del alto el fuego, según Kiev, impide de momento la retirada de ese armamento para crear una zona de seguridad, el segundo de los trece puntos de los acuerdos de Minsk.