15 cosas por las que los padres y madres deberían dejar de preocuparse en 2015
Cuando te conviertes en padre o en madre, no solo tienes un niño, sino que adquieren valor nuevas cosas por las que preocuparse para toda la vida. Así que ahora, en lugar de centrarnos en todo por lo que los padres deberían preocuparse, vamos a destacar las cosas por las que no deberían estresarse.
Por eso, pedimos a la comunidad de HuffPost padres que citaran los factores de estrés que están tratando de dejar a un lado en 2015 y encontramos que hay dos cosas en común: las casas sucias y el poco tiempo para limpiarlas.
Estas son las cosas por las que los padres y madres no se preocuparán este año:
1. Una casa desordenada. Al final del día, mis hijos no van a recordar si la casa estaba impecable o no. Lo que van a recordar, sin embargo, es que estaba demasiado ocupado en obsesionarme con los suelos como para jugar con ellos.
2. La lactancia materna. Si no puedo llegar a mi meta de los 6 meses... ¡No pasa nada! Está creciendo muy bien con algo más que la leche materna y eso es lo que importa.
3. Mi hija NUNCA lleva la ropa a juego. Nadie tiene tiempo para eso.
4. Recoger sus juguetes cuando 10 minutos más tarde ellos van a desordenarlos de nuevo. En cambio, voy a sentarme y a jugar con ellos.
5. La hora de comer.
6. ¡Las mañanas! Si todo el mundo se alimenta de verdad, no importa el tiempo que necesiten para eso.
7. Mi hijo empieza la guardería en enero. ¡Estará bien!
8. Queramos o no nuestras decisiones y reglas hacen que parientes lejanos se enfaden o molesten
9. Dejar los pañales. ¿Y qué si mi hijo usa pañales en el jardín de infancia?
10. Las cosas que ni siquiera han sucedido.
11. Voy a dejar que mi hijo sea más independiente. Estoy cansado de ser uno de esos paraguas.
12. Dinero. Siempre estoy tratando de no hundirme pero, en realidad, no es tan malo. Tengo que aprender a relajarme y a no preocuparme tanto.
13. Lo que otros piensan del comportamiento de mis hijos.
14. Tiempo. Voy a aprender a ir más despacio y a no andar siempre con prisas. Voy a valorar el tiempo que paso con mi hijo de tres años, incluso si tarda una eternidad en salir por la puerta.
15. Los calcetines a juego.
¡Feliz año nuevo!
Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés.