¡Las guerreras son de plata!
¡Las guerreras son de plata! La selección española de balonmano femenino se ha quedado este domingo a las puertas de llevarse el Europeo de Hungría y Croacia. Pero no pudieron vencer al todopoderoso equipo noruego, vigente campeón olímpico, en la final (28-25).
España, que llegó a ir ganando en el primer tiempo por hasta cinco goles (5-10), se fue al descanso con ventaja de dos (10-12), pero en el segundo tiempo no pudo con la reacción de las noruegas, que acabaron ganando la final por tres tantos.
Nerea Pena, con 10 goles (5 de penalti), fue la mejor del equipo español, que se topó con la portera Silje Solberg (15 paradas). Linn-Kristin Koren (10 goles, 5 de penalti) y Nora Mörk (7, 1p) lideraron el ataque noruego.
SILVIA NAVARRO, UN MURO
Liderada por una de nuevo inconmensurable Silvia Navarro bajo los palos, la defensa española se multiplicó para cerrar cualquier mínimo espacio a un conjunto noruego, que tan sólo sumaba tres goles cumplidos los primeros catorce minutos de juego.
Ni en superioridad numérica lograban anotar las nórdicas, atónitas ante la velocidad de piernas de las jugadoras españolas, que no sólo cubrían cada posible resquicio, sino que además, y quizá lo más importante, imposibilitaron a Noruega a desplegar su demoledor juego de contragolpe con un fulgurante repliegue.
Pero para vencer a las todopoderosas nórdicas, indiscutibles números uno del balonmano mundial, no es suficiente con una modélica defensa, algo de lo que eran plenamente conscientes la "guerreras" que exhibieron lo mejor de su arsenal ofensivo.
De la mano, primero de Alexandrina Barbosa, que por fin realizó ese gran partido con la selección desde que aterrizó en el equipo nacional, y posteriormente de Nerea Pena, el conjunto español martilleó una y otra vez la portería noruega.
LA MEJOR NORUEGA
Noruega, contra las cuerdas, recuperó, aferrada a la portera Silje Solberg en el segundo tramo del primer tiempo, su mejor versión, lo que le permitió ir ajustando cada vez más y más el marcador, que acabó por igualar (12-12) a los pocos minutos de la reanudación.
Circunstancia que no destempló al equipo español, que se mostró mucho más permeable en defensa, ni tan siquiera el pánico se apoderó de las de Jorge Dueñas, cuando Noruega se situó con más que una inquietante ventaja de dos goles (17-15) en el marcador.
Un momento clave que España logró superar a base de carácter, el que mostró Marta Mangué, que se olvidó de sus fallos en el lanzamiento de la primera parte, con dos goles casi consecutivos que pusieron de nuevo las tablas (20-20) al duelo.
No pudo superar, la selección española, por contra, la nueva exclusión, la cuarta con la que fue castigadas las de Jorge Dueñas, uno de los factores que parecieron decantar definitivamente la final y el título en favor de las noruegas.
El otro fue la escasa efectividad desde el punto de penalti, donde España se dejó escapar cuatro opciones de gol, lo que permitió a Noruega situarse con una máxima renta de cuatro tantos (25-21) a falta de diez minutos para la conclusión.
Pese a la derrota, el equipo español consigue igualar su mejor actuación en un torneo, la plata que también lograron en el Europeo de 2008. En su palmarés figura además un bronce olímpico en 2012 y un tercer puesto en el Mundial de 2011.
¡Bravo guerreras!