Blesa pretende que la aseguradora de Caja Madrid le pague la fianza de 16 millones
Miguel Blesa pretende que sea Mapfre, compañía aseguradora de Caja Madrid, la que pague la fianza de 16 millones de euros que el juez Fernando Andreu le impuso el pasado jueves por el escándalo de las 'tarjetas B' opacas.
El expresidente de la caja presentó el pasado viernes formalizando esta solicitud y reclamando al Juzgado Central de Instrucción número 4 de Madrid que se dirigiera a Mapfre para formalizar el pago.
Andreu ha rechazado su petición en una providencia y ha confirmado que el banquero tiene de plazo hasta el miércoles para hacer efectiva la fianza. En caso de no pagar, recuerda el magistrado, se procederá al embargo de sus bienes. Blesa pretende recurrir en cinco días la fianza, aunque la presentación de este escrito no paraliza el plazo del que dispone para hacer efectiva la caución.
Pero Blesa no puede hacer frente a tal cantidad, según fuentes cercanas al expresidente de Caja Madrid consultadas por Europa Press, por lo que deberá asumir el embargo de su patrimonio. Según estas fuentes, no dispone de capacidad económica suficiente.
Sí pudo hacer frente en mayo de 2013 a la fianza de 2,5 millones de euros que le impuso el juez Elpidio Silva para eludir su ingreso en prisión. Esta vez, la fianza es por responsabilidad civil y no se trata, por tanto, de una medida cautelar para evitar la cárcel.
EL PROCEDIMIENTO DE EMBARGO
El procedimiento habitual a seguir por los juzgados en caso de embargo es proceder a una averiguación patrimonial, solicitando a los organismos citados la localización de sus bienes con el objeto de elaborar un listado que incluya conceptos como salarios, pisos, vehículos o acciones. Tras ello, se librará un oficio para proceder a su embargo comenzando por aquellos con mayor liquidez, como cuentas y acciones.
En el caso de los pisos, se pedirá una nota simple al Registro de la Propiedad para comprobar si tiene cargas y un perito tasará la vivienda. Si los afectados aportan sus propios peritajes, estos se contrastarán con los ordenados por el juez.
Los consejeros de Caja Madrid gastaron con sus tarjetas opacas durante el mandato de Miguel Blesa (de 1996 a enero 2010) un total de 12,5 millones, mientras que durante la presidencia de Rato en la caja madrileña (entre enero de 2010 y diciembre de 2011) cargaron un total de 2,6 millones de euros. Blesa se gastó 436.700 euros con estas tarjetas.