Los 'brunch' más pijos (y maravillosos) del mundo (FOTOS)
Soñar es gratis. Estos brunch maravillosamente pijos no. Solapar desayuno y comida y alimentarse como reyes es posible, al menos por un día, en cualquiera de los siguientes restaurantes situados en hoteles de lujo de todo el mundo.
Lujo prohibitivo en Dubai
Hace tres meses el restaurante Imperium de uno de los hoteles más caros de Dubai (Emiratos Árabes Unidos), el Jumeirah Zabeel Sarayhaz, lanzó el Royale Brunch. Por solo dos mil quinientos dirham (casi quinientos euros) se le suma al buffet estándar del hotel una botella de Dom Pérignon y caviar de beluga. Los comensales con este pase VIP disponen de su mayordomo personal y pueden elegir si comer en el propio restaurante, en una zona privada o en la exclusiva terraza del establecimiento, con vistas a los jardines y canales creados de manera artificial en el amplio resort que la cadena Jumeirah ha montado en medio del desierto. Hay versiones más económicas por sesenta euros.
El brunch de Nandu Jubany en Barcelona
Más cercano y, en cierto modo, más asequible, es el brunch de lujo que se sirve en el patio del hotel Majestic situado en el Paseo de Gracia de Barcelona. Una copa de champán Moët & Chandon inaugura la sesión gastronómica rediseñada recientemente por el chef Nandu Jubany. Pagando unos cincuenta y dos euros se puede acceder a una amplia selección de platos fríos (ceviche de vieira con aguacate y cebolla roja, ensalada de bogavante con puré de ají amarillo y lima o rodaballo con crustáceos al azafrán entre ellos) y calientes, como canelones de pollo de payes asado o dumpling de pato a la naranja. También disponen de una selección de quesos catalanes.
Como Brenda y Brandon en Beverly Hills
El brunch Sunday Jazz que cada domingo sirve el Beverly Hills Hotel de Los Angeles en su Polo Lounge cuesta cincuenta euros e incluye una bebida, un entrante, un plato y un postre. La ensalada McCarthy y la hamburguesa de la casa son sus especialidades. Seguramente aquí es donde pasaban los días de resaca con sus padres los protagonistas de Sensación de vivir.
Mejor que el té de las cinco en Londres
Hay que invertir varias horas para degustar el buffet del Cookbook Cafe en el hotel InterContinental Park Lane de Londres. Es eminentemente universal: cuscús, sashimi y salmón escocés pueden compartir plato. También destaca por sus postres. Cuesta cincuenta libras (sesenta y dos euros), pero ¿cuántas veces se puede desayunar-comer en pleno Hyde Park sin recurrir al picnic?
El más antiguo de Madrid
El histórico Hotel Ritz de Madrid puede presumir de contar el que es seguramente el brunch más antiguo de la ciudad. Desde 1987 brinda la posibilidad de unir desayuno y comida. En la actualidad ofrece a un precio de ochenta euros su extensa selección gastronómica al aire libre, en su terraza, si el tiempo lo permite. Una fuente y un pianista para generar buen clímax y tartas tan bonitas que da pena comérselas.