Las Cortes de Castilla-La Mancha aprueban la supresión definitiva de la Sindicatura de Cuentas
Más recortes al control democrático. Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado este jueves, de manera definitiva y con el voto en contra del PSOE, la ley por la que se suprime la Sindicatura de Cuentas, una medida con la que se pretende ahorrar 1,6 millones de euros y eliminar duplicidades.
La eliminación de este organismo, cuyas funciones pasarán al Tribunal de Cuentas, ha salido adelante con el apoyo del PP y la oposición del PSOE, mientras que las nueve enmiendas parciales que los socialistas han mantenido vivas para su debate en el Pleno de las Cortes han sido votadas en contra por los populares.
La supresión de la Sindicatura de Cuentas, un órgano que se creó en 1993, se suma a la eliminación del Defensor del Pueblo autonómico, del Consejo Económico y Social y de la Comisión Regional de la Competencia, unas medidas que permitirán ahorrar a la administración, en total, "más de 70 millones de euros", según ha calculado el diputado del PP en las Cortes José Manuel Tortosa.
El consejero portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, ha subrayado en su intervención en el debate -que ha sido seguido desde la tribuna de invitados por el síndico, Miguel Ángel Cabezas de Herrera- que la supresión de este órgano supone "el último paso" en la comunidad para eliminar órganos duplicados, que existían a nivel regional y estatal, y hacerlo de manera "ejemplar".
Esteban ha subrayado que el objetivo de esta medida es "intentar construir una administración del siglo XXI, racional y que entiendan los ciudadanos" y ha defendido que no se produce "menoscabo de ninguna función de control del Gobierno ni en materia presupuestaria y financiera".
EL PSOE: "ESTORBABA Y NO INTERESA A COSPEDAL"
En cambio, la diputada socialista Delfina Carrasco ha cuestionado que el objetivo de esta supresión sea el ahorro y ha mostrado sus sospechas de que el motivo de la eliminación de la Sindicatura de Cuentas es porque "estorbaba, porque el Gobierno regional sabía que nunca podría hacer informes favorables a los inhumanos recortes".
"Está claro que no interesa a Cospedal que la Sindicatura de Cuentas ponga de manifiesto el número de trabajadores públicos despedidos en 2012", ha denunciado la diputada socialista.
También ha puesto en duda que realmente, con la supresión de la sindicatura, se vaya a producir un ahorro efectivo, pues ha señalado que tan solo se va a producir el despido de una persona y ha apuntado que precisamente el contenido de una de las enmiendas que ha sido rechazada iba encaminada a mantener la contratación de esta persona, que ejerce las labores de conserje.
Tampoco ha salido adelante la propuesta para crear una oficina de control presupuestario adscrita a las Cortes regionales y Carrasco se ha preguntado por el motivo para rechazar la propuesta: "Si son tan buenos gestores, ¿cuál es el problema?", ha inquirido.
El diputado del PP José Manuel Tortosa, que ha sido el encargado de defender el dictamen de la ley, ha incidido en que esta medida no supondrá una "menor fiscalización" de las cuentas públicas ni un menor control de la acción del Gobierno regional, pues ha reiterado que, además de que estas tareas las asumirá el Tribunal de Cuentas, ya existe una Oficina de Control Presupuestario adscrita a la Consejería de Presidencia.