La infanta Cristina utilizó casi 600 evasivas en su declaración ante el Juez
Si algo caracterizó la declaración de la infanta Cristina ante el juez que investiga el caso Noos, José Castro , fue la monotonía. La hija del rey, que llevaba muy bien preparada su intervención, se escudó de forma recurrente en vaguedades como 'No sé' o 'lo desconozco'.
En total fueron 579 evasivas evasivas a las preguntas sobre su papel al frente de la sociedad de la que es copropietaria junto a su marido, Iñaki Urdangarin, según ha calculado la agencia Europa Press. Entre las imprecisiones en que incurrió, unas 412 veces dijo 'no lo sé' o 'no sé' a las preguntas que le formularon durante el interrogatorio, mientras que en 82 ocasiones aseguró 'no lo recuerdo'. El resto de evasivas las saldó con 58 'lo desconozco', siete 'no me consta', siete 'no lo sabía' y un 'no tenía conocimiento', entre algunas otras.
Durante su declaración como imputada por delito fiscal y blanqueo el pasado 8 de febrero, la infanta —quien reconoció al juez que no tiene ni conocimientos jurídicos, ni tributarios ni económicos— afirmó sobre Aizoon: "Yo no he tenido nada que ver con las facturas ni he llevado el control, es mi marido el que lo ha llevado". "No tengo ni idea de lo que hacía Aizoon", añadió, y agregó que que nunca ha tenido "ningún control sobre las cuentas, ni nada que ver con Aizoon", la sociedad que tenía a medias con su marido, Iñaki Urdangarin.
"Confiaba en él, él me lo sugirió y así lo acepté", afirmó la infanta Cristina ante el juez, a quien expuso que su esposo le propuso constituir una empresa al 50 % "para canalizar sus ingresos profesiones". "A partir de ahí yo no he tenido nada más que ver, ya lo ha llevado él, yo no he intervenido en nada", recalcó.
El juez preguntó a Cristina de Borbón si conocía a Rafael Guijosa, que fue jugador junto con Iñaki en el equipo de Balonmano del Barça, así como por su relación con el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, a lo que la Duquesa de Palma respondió negativamente.
Dijo también que no sabía si Aizoon había cobrado por algún proyecto con dicha Corporación, a lo que el juez Castro le precisó que, dado dicho desconocimiento, debía precisarle que este extremo sí se había producido.
El magistrado le mostró un correo que Guijosa le remitió a su esposo el 7 de enero de 2003, dos días después de dicha Cabalgata, en la que éste le dice que, tal y como habían quedado, le envía parte del trabajo que está realizando y en el que cree que el Duque podría colaborar. "Míralo tranquilamente y ya veremos", le decía el exjugador según la transcripción a la que ha tenido acceso Europa Press.
COBROS DEL AYUNTAMIENTO
En este punto la Infanta afirmó que su marido no le había hablado de este asunto, a lo que el juez replicó señalando que, efectivamente, Aizoon obtuvo dos cobros en relación a este asunto, uno por 4.000 euros y un segundo por 7.000. Otros documentos, de la Agencia Tributaria, apuntan cobros procedentes de este Ayuntamiento por 8.132 y 11.000 euros como venta declarada.
"Cuando usted fue a Alcalá con su marido qué le dice, 'Vamos a Alcalá para salir en un balcón en una cabalgata'?" le preguntó el juez a la Infanta, a lo que ésta contestó que la idea era "evitar ir a la cabalgata masiva y grande en Madrid". "Desplazarnos a una cabalgata un poco más pequeña y bueno, y poderla disfrutar con nuestros hijos", añadió la hija del Rey.
En este punto Castro le repreguntó si Iñaki no la había comentado en dicha ocasión algo tan "natural" como que debían ir a dicha localidad porque "de paso, mira tengo que hablar con un señor, que igual me propone un negocio interesante", a lo que la Infanta contestó negativamente. "No, porque no hablamos de nuestros negocios en casa".
El resto de evasivas las saldó con varios "no lo sabía", "no tenía conocimiento", "no me consta" y "lo desconozco".