Surf en lugares extremos: Kamchatka (FOTOS)
A más de 9.000 kilómetros de Moscú, Kamchatka sigue siendo Rusia. El nombre evoca un lugar lejano, el Risk o el cangrejo (¿quién no ha probado la chatka?). Esta península es uno de los lugares más salvajes y vírgenes del país. Una enorme reserva llena de osos, salmones, volcanes y valles de géiseres.
Los lugareños dicen que aquí no carreteras, solo direcciones. De hecho, muchos lugares solo son accesible por helicóptero, lo que dispara los precios del turismo y, al mismo tiempo, mantiene intacto el lugar. Esta falta de infraestructura es a la vez una bendición y una maldición. Además, la condiciones climáticas son duras, con un invierno que dura nueve meses, y durante gran parte del año se está a temperaturas bajo cero.
La capital es Petropavlovsk, situada más cerca de Tokio que de la capital rusa; fue fundada en la primera mitad del siglo XVIII por Vitus Bering, capitán que dio nombre al estrecho entre Rusia y Alaska. Excepto las vistas sobre una cadena de volcanes nevados, y el hecho de que puede ser el campamento base para otras actividades, la ciudad no tiene especial interés.
Pocos saben que, en esta península de más de 1.200 kilómetros de longitud, la costa está plagada de playas vírgenes con olas excepcionales. En 2004, los surfistas Keith Malloy y Dane Gudauskas fueron los pioneros entre los occidentales en zambullirse en estas aguas.
Hacer surf aquí no es fácil, y no solo por las dificultades para acceder. El agua está fría, la temperatura máxima en verano es de 17 grados, y no hay infraestructura. Sin embargo, los surfistas que consiguen llegar hasta aquí dicen que merece la pena: la buena calidad de las olas, la naturaleza, la calma... es un paraíso escondido. Las imágenes seleccionadas hablan por sí solas.
Aunque Rusia no se asocie con el surf, hay otros lugares donde poder practicarlo. Entre ellos destacan la exótica ciudad de Vladivostok y Sochi, ciudad a orillas del mar Negro donde el 7 de febrero comienzan los Juegos Olímpicos de invierno.
Otras atracciones de Kamchatka
Esta es una tierra de mucha actividad volcánica y es posible hacer rutas por una meseta rodeada por nueve volcanes activos. Se pueden visitar los campos de lava y subir a la boca del volcán Tobalchik, además de visitar un paisaje lunar (tanto es así que es aquí donde se probaban los vehículos soviéticos para mandar a la Luna).
En este lugar abundan los animales salvajes. Los osos, las águilas y los salmones son algunos de los más habituales, por no hablar de los mosquitos. Es posible admirar a los osos pescar en el lago Kurílskoe, con un radio de 77 km y rodeado de volcanes. Se trata de un espectáculo único.