Blesa, en un correo electrónico en 2009: Aguirre "No tiene ni puta idea"
Los emails que recibía y enviaba el expresidente Caja Madrid Miguel Blesa siguen dando mucho de qué hablar. El diario El Mundo publica este sábado correos en los que Blesa aseguraba que la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, "no tiene ni puta idea" y otros en los que recibía órdenes de la propia Aguirre para colocar a determinados consejeros en empresas participadas por la caja.
En uno de esos emails, la mujer de Blesa comenta unas declaraciones de Aguirre en 2009 sobre la solvencia de Caja Madrid por dejar de pagar los intereses de dos bonos hipotecarios y el hecho de que la entidad gastara más de 500.000 euros en un coche para Blesa. La respuesta del expresidente no se hace esperar: "No tiene ni puta idea. ¿Qué es eso de no tener beneficios? ¿A qué cliente pensará ella que hemos dejado de pagar?"
Un año antes, en 2008, Blesa ya reconocía en otro correo enviado a una empleada que la compañía no pasaba por buenos momentos: "Nuestro negocio está pasando por los peores momentos que se recuerdan, nuestro proyecto de sacar a Bolsa Cibeles se encuentra con la peor coyuntura imaginable".
Los correos que revela El Mundo desvelan, además, las órdenes de Aguirre para que Blesa colocara a determinados consejeros en empresas participadas por la caja, como Iberia. "Me dice la jefa que si tienes que poner dos consejeros de la caja en Iberia, y uno es ejecutivo de la caja, que el otro sea Mercedes Rojo", le dice Ignacio González en un SMS.
Aguirre también le habría pedido que ayudasen a una prima suya que tuvo un problema en la concesión de una hipoteca. "Hágalo", fue la respuesta que Blesa dio a una de sus empleadas.
TARJETAS DE CRÉDITO EN NEGRO
Este mismo sábado, eldiario.es publica también emails en los que el secretario del consejo de Caja Madrid informa de las retribuciones de los consejeros. Según el directivo, las tarjetas son "black a efectos fiscales" que cubrían gastos de representación de hasta 50.000 euros.
Expertos consultados por ese mismo diario entienden que se trata de un complemento que se les paga, una suerte de gastos de representación, por los que no tributan.
Eldiario.es explica que el problema de este tipo de tarjetas es que no se exige facturas para asegurarse de que los gastos que se cargan en ellas tengan que ver con labores de representación. La tarjeta –que sufraga Caja Madrid– no solo es opaca tributariamente: también permite utilizar recursos públicos para gastos personales.
AZNAR Y SUS RECOMENDACIONES ARTÍSTICAS
Además, El País revela otros emails en los que el expresidente del Gobierno José María Aznar intentó que Blesa pagara 54 millones por obras del artista Rueda. Blesa llegó a ofrecer por ellos 54 millones de euros y se afanó por hacer la operación a través de la Fundación Caja Madrid, pese a que la entidad financiera ya daba signos de grave debilidad.
El director de la Fundación Caja Madrid, Rafael Spottorno, hoy jefe de la Casa del Rey, puso reparos a la valoración de la colección — dijo que era "un precio disparatado”—, y desaconsejó cerrar la operación por “inabordable”.
Durante las negociaciones, el precio de la adquisición se redujo de los 54 millones iniciales por un paquete de más de 200 obras a seis millones de euros. Aznar también medió con el entonces alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, para que cediera un inmueble municipal como museo permanente de arte contemporáneo.