'Cásate y sé sumisa': Las 35 frases más polémicas del libro editado por el Arzobispado de Granada
No debe de ser fácil decidir en qué sección de una librería se coloca 'Cásate y sé sumisa', el polémico libro escrito por la periodista italiana Costanza Miriano y publicado por el Arzobispado de Granada que enseña la "obediencia leal y generosa, la sumisión".
¿Autoayuda? ¿Espiritualidad? ¿Religión? ¿Sociología? ¿Psicología? ¿Narrativa extranjera? De momento, los libreros no están teniendo demasiado problema con ello. Por ejemplo, en La Casa del Libro está agotado, como se muestra en su web y reconocen en alguna de sus tiendas. En una cadena de librerías pertenecientes al Opus Dei, 'Cásate y sé sumisa' vuela. No dan abasto a colocarlo en las estanterías y, cuando algún cliente pregunta por él, acuden directamente al almacén.
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En pocos días, esta obra ha alcanzado un éxito total en España: esta semana se ha convertido en uno de los más vendidos de Amazon, donde en ocasiones es el primero en la lista de los más solicitados.
Y eso a pesar de la polémica que ha generado por sus discutibles afirmaciones. IU, PSOE, PP y hasta la propia ministra de Sanidad han pedido que se retire de la venta al considerarlo una "falta de respeto" que puede incurrir incluso en apología de la violencia machista.
El libro parte de una afirmación rotunda: la paridad no existe porque hombres y mujeres no son iguales. A partir de ahí, la autora desgrana en cartas a sus amigas y amigos su visión del matrimonio. Esos documentos describen a los hombres, "la otra raza", como seres sólo preocupados por la informática y el fútbol, incapaces de hacer más de una cosa a la vez.
En una de las cartas dirigida a un amigo, la autora llega a escribir sorprendida: "Prefieres hablar conmigo en lugar de emitir sonidos inarticulados junto a tus semejantes ante un partido cualquiera de un deporte cualquiera".
ENTREVISTA A LA AUTORA: "SI EL PROBLEMA ES LA PALABRA 'SUMISA', QUEMAD LA BIBLIA"
En cambio, presenta a las mujeres como seres preocupados por su belleza y las técnicas de maquillaje, que hablan y hablan en eternas charlas por teléfono con amigas y que deben ser el apoyo de su marido e hijos. La autora toca otros palos como la religión (se refiere en varias ocasiones a dios como "El Jefe" y a sí misma como "Miss misa"), la inmigración (de los sudamericanos dice que, para ellos, "el reloj es un instrumento que como máximo hace sugerencias") o el aborto ("una traición radical para una misma").
Miriano aborda también el perfil ideal de un hombre para ella. "A mí, los hombres que tienen opiniones pétreas y las transmiten de forma tajante y valiente me gustan muchísimo", dice. En cambio ve "con abatimiento" a los "presumidos y vanidosos con ambiguo olor a mujer que frecuentan al esteticista para depilarse".
En este sentido, la autora asegura que le gustaría que Pep Guardiola, el entrenador del Bayern de Múnich, fuera su entrenador personal. "No es que lo prefiera porque sea guapísimo", aclara.
El Arzobispado de Granada aprovecha la página final del libro para dejar una cuenta bancaria en la que abonar donativos.