Cervera reconoce su "enorme imprudencia", insiste en su inocencia y anuncia que no volverá a la política
Dimitió de manera fulgurante y ofreció unas breves explicaciones a la prensa. Sin embargo, en la noche de este lunes, Santiago Cervera acudió al programa de radio en el que era tertuliano para explicarse con más detalle.
En Hora 25, de la Cadena Ser, el ya exdiputado del Partido Popular reconoció haber cometido una "enorme imprudencia" al recoger un sobre cuya existencia fue apuntada por un ciudadano anónimo a través de un correo electrónico. Según esta comunicación, facilitada por el ex diputado a la prensa, el sobre contenía información "absolutamente importante sobre el caso de Caja Navarra", una entidad financiera con cuya gestión Cervera había sido muy crítico. Al llegar a recogerlo, fue detenido por la Guardia Civil, que había recibido la denuncia del presidente de la entidad, José Antonio Asiáin, en la que sostenía que estaba siendo víctima de un chantaje.
¿EXTORSIÓN? "ROTUNDAMENTE NO"
¿Está Cervera implicado en un caso de chantaje? "Rotundamente, no", aseguró. Cervera dice no tener nada que ocultar, pero ante la presencia de una cámara municipal decidió acudir al lugar "con un gorro y una bufanda".
¿Por qué lo hizo? Por su interés en la gestión de la caja y tras percatarse de que no podía exigirle al ciudadano anónimo que le remitiese la documentación de otra manera. "Lo hice porque es un asunto que a mí me ha interesado desde hace muchísimo tiempo", dijo durante la entrevista. "Era un asunto especialmente interesante para mí" y hay una razón de "interés político evidente", dijo, ya que pensó que él podía servir como mediador para "hacer llegar a la Fiscalía algun tipo de dato" relevante sobre supuesta corrupción en la entidad.
"ALGO CONSPIRATIVO" O "DIVERSIÓN MACABRA"
Ahora, Cervera cree que o bien se trata de una trampa, "algo conspirativo" o bien "que alguien haya intentado divertirse de una forma macabra". Tratará de defenderse ante la justicia, una justicia a la que no acudió tras recibir el anónimo porque "no era amenazante". Eso es precisamente lo que sorprende a Asiáin, supuesta víctima del chantaje, que sí denunció la extorsión de hasta 25.000 euros.
Cervera reconoció que la trama, más propia de una película, es algo "muy chusco". Y ha colmado el vaso de su paciencia política. Tras dimitir de inmediato y sin el respaldo de su partido, que sí ampara a imputados en casos de corrupción, el ex diputado no tiene ganas de volver a la política. Tampoco aunque sea declarado inocente. "Me va a venir bien orientar mi vida hacia otros derroteros", confía.