El delegado del Gobierno en el País Vasco pide al videojuego 'Counter Strike' que quite a los etarras
El delegado del Gobierno central en el País Vasco, Carlos Urquijo, ha pedido que no se ponga a la venta el videojuego Counter-Strike: Global Offensive que ofrece la posibilidad de jugar como miembro de ETA, ya que, a su juicio, es un "disparate absoluto" y una "inmoralidad" que "humilla" a las víctimas.
En declaraciones a Europa Press, Urquijo ha solicitado a la compañía norteamericana, Valve Corporation, que, tal y como está diseñado, no comercialice este producto cuyo lanzamiento está previsto para el 21 de agosto.
La nueva entrega permite a emular a terroristas, denominados Separatists (separatistas), que aparecen ataviados con capuchas blancas y txapelas como las que usa ETA en sus comunicados.
Counter-Strike es un juego multijugador en primera persona en el que se enfrentan diferentes grupos de terroristas y antiterroristas. El jugador puede elegir el bando y el equipamiento de los personajes.
El delegado del Gobierno en Euskadi ha subrayado, además, que la productora comete el "error" de calificar a los integrantes de ETA como "separatistas". "Es algo que suelen hacer los americanos, que no saben muy bien de quién estamos hablando", ha agregado.
Urquijo cree que, en caso de salir al mercado, el videojuego sería una "humillación" a las víctimas del terrorismo y una "ofensa" a todos los españoles "que tanto hemos sufrido por la violencia terrorista", para que ahora se "frivolice" con ella "convirtiéndolo en un juego virtual".
FACUA TAMBIÉN PIDE CAMBIOS
La organización de consumidores FACUA también ha pedido al fabricante del videojuego que elimine las referencias a ETA de esta nueva entrega "por sensibilidad y respeto a la memoria de las víctimas y sus familiares".
FACUA pide a la empresa que asuma el código de conducta de la industria del videojuego en Europa, PEGI, y no muestre imágenes que puedan atentar contra las "víctimas del terrorismo".
En una nota de prensa publicada en su página web, la organización añade que espera que la empresa "recapacite" sobre el contenido del videojuego y haga los cambios necesarios para que cuando salga a la venta "haya quedado eliminada cualquier elemento que pueda asociarse a ETA, por respeto a las víctimas y su entorno".
La organización señala que "considera grotesco convertir tanto los actos terroristas como la lucha contra el terrorismo de ETA o cualquier otra banda en un juego" y añade que "banalizar un problema que sigue latente en España e invitar a la diversión en torno al terrorismo mediante un videojuego delata una enorme falta de sensibilidad por parte de sus creadores".