Cómo afrontar... que 'Cosmopolitan' contrate a Jorge Cremades como articulista

Esta semana el intenso calor ha venido acompañado de alguna que otra polémica, como la del artículo de Jorge Cremades sobre "Cómo afrontar el primer viaje con tu novia". Por lo visto, las redes ardieron con comentarios y críticas hacia el youtuber porque consideraban su texto machista y carca, y yo me pregunto por qué estamos desperdiciando nuestros dardos apuntando a la diana equivocada y no pedimos cuentas a quien es en realidad responsable de tamaño disparate: la revista Cosmopolitan.

Que Jorge Cremades hace bromas sexistas ya lo sabíamos desde que se abrió un perfil en Vine y luego continuó con su canal de Youtube. El artículo no es más que una réplica de sus vídeos traducidos a formato texto: situaciones cotidianas y triviales con estereotipos de género a troche y moche... Nada nuevo bajo el sol, excepto una cosa: que esta vez no se difunde desde sus redes sociales sino desde una revista sobre mujeres para mujeres y ahí, queridas amigas, la cosa cambia.

Que existan tipos como Jorge Cremades a mi, personalmente, no me despeina, es lo que tiene internet, que cualquiera puede generar contenidos y siempre hay un público para ello. Me preocupa más cuando este tipo de contenidos se emiten desde un medio de comunicación que se supone profesional, como por ejemplo en televisión. Series como La que se avecina podrían ser el canal de Youtube de Jorge Cremades con un poco más de presupuesto: un programa de humor machista, racista, homófobo y clasista que es líder de audiencia y lleva años sin salir de la parrilla. Disculpadme, pero no veo a nadie poniendo el grito en el cielo.

En este caso el medio de comunicación ha sido Cosmopolitan, una revista de tirada internacional que además está "especializada" en género femenino. He tenido serias dudas sobre si poner esta última frase entre exclamaciones o interrogaciones porque estoy igual de perpleja que confundida. Que el equipo de redacción y la propia directora, Ana Ureña, hayan decidido contratar a un personaje cómico/actor/youtuber que trata a las mujeres como tontas para dar consejos a sus lectoras es, cuanto menos, preocupante. Que el equipo de redacción y la propia directora, Ana Ureña, hayan leído, aprobado y publicado ese artículo es... insultante. Es a la revista a quien tenemos que pedir explicaciones.

Bastante complicado es ya para las mujeres ser visibles en los medios sin tener que desnudarse, como para ceder ese preciado espacio, una hoja, 600 palabras todos los meses del año, a un hombre que dice que si viajas con tu novia hay que "evitar el turismo sexual", "tener habitaciones espaciosas para poder tirar la ropa y pedos sin que se te oiga", "que ella coma ensalada y tú te hinches a comer" o "mi amiga se fue sola y volvió siendo lesbiana". ¿De verdad no hay mujeres interesantes que puedan llenar este espacio con testimonios y opiniones que nos enriquezcan, nos diviertan y nos aporten cosas?

Por si a Cosmopolitan le faltan ideas, aquí van algunos nombres de mujeres cómicas que estaríamos deseando escuchar en algún medio de comunicación: Las XL, Esther Gimeno Gascón, Esther Vidal, Pamela Palenciano, Velilla Valbuena... Mujeres que cuenten experiencias que nos interesan de verdad, que no perpetúen roles sexistas y que tengan un mínimo de cultura y de sensibilidad.

Lo confieso, no soy fan de las revistas femeninas. La mayoría (por no decir todas) se centran en la belleza física como único valor de las mujeres y en la compra y el consumo de productos de belleza combinados con toda clase de complementos: bolsos, zapatos, ropa... La "chica cosmo" es la mezcla perfecta entre la Señorita Pepis y una percha. Podría ser una conejita playboy que espera en casa en liguero y picardías con cofia de sirvienta y pestañas postizas para satisfacer a su hombre. Por descontado, la" chica cosmo" es heterosexual, joven, blanca y de talla 36. Se pasa el año haciendo dietas, no lee libros (¿eso qué es?), no le interesa la política y mucho menos lo que ocurre en el resto del mundo, pero sabe ir hot al trabajo y lucir una melena perfecta en bodas, bautizos, comuniones, cumpleaños, despedidas de soltera y fiestas de guardar, porque otra cosa no, pero las "chicas cosmo" son unas celebrities en potencia y sólo les preocupa qué modelo ponerse en el próximo sarao.

Entiendo las críticas a Cremades y comparto lo peligroso que es que un influencer al que siguen millones de personas perpetúe roles sexistas sólo por obtener más likes y más shares. "Yo sólo hago humor" no es un argumento que exima de las consecuencias morales y éticas de nuestro trabajo. Pero en este debate he echado en falta que se cuestione al medio que le ha contratado y que se supone profesional y cualificado para seleccionar unos contenidos.

Me cuesta entender que la revista Cosmopolitan no haya dicho nada al respecto, y sólo hay dos explicaciones para esto: o le importa un pimiento la opinión de sus lectoras o no hemos sabido hacer llegar nuestras quejas al destinatario correcto: @Cosmopolitan_es