Máximo Huerta cuenta la surrealista historia que le pasó en su última conversación con Pedro Sánchez
Ver para creer.
El exministro de Cultura y Deporte Máximo Huerta reveló este lunes en su entrevista en El Hormiguero cómo fue su última conversación con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, antes de dimitir.
Huerta recordó que acudió al Palacio de la Moncloa en coche y con un discurso escrito en el móvil para imprimirlo. Antes de hablar con Sánchez, tuvo que esperar en una sala contigua al despacho del jefe del Ejecutivo: "Se me hizo eterna y aproveché para hacerme un selfie con un cuadro azul".
Minutos después ya pudo entrar en el despacho para hablar con el presidente del Gobierno y decirle que se iba. Sin embargo, la conversación no fue como él esperaba, tal y como contó.
"Lo paradójico fue que tras decirle que dimitía empezó a hablarme de él y a decirme que todos los presidentes acaban mal en política. Me puso de ejemplos a González, Rajoy, Zapatero.... '¿De mí qué dirán?'", relató.
Huerta añadió que le entraban ganas de decirle que estaba hablando él: "Él me preguntaba que qué dirá de él la historia". "Yo me acordé cuando dijo que pasaría a la historia que ya me lo había dicho a mí en aquella charla de tú a tú", sentenció.
Tras dimitir, Huerta se fue a casa con su madre, no pusieron la televisión y cenaron calabacín con huevo, una comida que reconoció que le encantaba. "Cenamos sin hablar en ningún momento", describió.
Al día siguiente se fueron a la playa, donde recibió un mensaje de que tenía que hacer el traspaso al próximo ministro. "Les dije que se la cogiera solo", ironizó.
"Al final tuve que ir y como por falta de tiempo aún no tenían la nueva cartera me tocó dar la mía de manera ficticia, aunque la volví a coger detrás de las cámaras", finalizó.