Cuenta lo que ha visto hacer a sus jefes en Alemania y demuestra que en todas partes cuecen habas
"Se puso tan, pero tan tan borracho...".

Alemania es vista desde España como un ejemplo de muchas cosas, entre ellas de productividad y saber estar en el trabajo.
Pero la usuaria de TikTok @ingridenalemania ha contado dos experiencias que ha tenido en ese país con sendos jefes y ha demostrado que ningún sitio es tan perfecto como parece y que, desde luego, en todas partes cuecen habas.
"Cosas funables que han hecho mi exjefes alemanes. En una summer party que tuvimos en la oficina, el dueño se puso tan pero que tan tan tan borracho que de la nada agarró a dos, un compañero de la India y un compañero de Nigeria, y nos empezó a preguntar a todos quién tenía la piel más oscura entre ellos", cuenta.
"Obviamente los dos se quedaron así... y todos así... Eso fue un viernes y el lunes el chaval de la India renunció. Además tuvieron una junta larguísima el día que el chico renunció de que los tres en la oficina junto con la de Recursos Humanos o no sé quién era y después de dos horas fue como... no pues fulanito ya se va, pero nunca nadie supo qué se dijo en esa junta", relata.
También ha destacado algo que hacía otra jefa en otra empresa: "Cuando empecé a trabajar en una empresa distinta, nos empezamos a hablar de quién tiene hijos y esta exjefa dice: 'Yo tengo dos hijos y mi esposo es de [inserte país del sudeste asiático] y por eso tienen la piel oscura".
"Nos quedamos así... nadie sabe quién son sus hijos, nadie le iba a preguntar nada de por qué son así. Y cada vez que podía hablaba del color de la piel de sus hijos", lamenta