Sentencia rotunda al camión eléctrico en Europa
Tras una verdadera prueba de fuego.
El camión eléctrico ha sido sometido a una reciente y auténtica prueba de fuego en Europa. Un testeo avalado por la friolera de 1.300 kilómetros y protagonizado por un grupo de expertos en la materia que han desembocado en un veredicto unánime y tajante.
Esta suerte de sentencia rotunda europea con el camión eléctrico -vehículo recargable- no es positiva. Todo lo contrario, evidencia que la electrificación del sector del transporte de mercancías no solo es una necesidad imperiosa en la actualidad, también es una asignatura pendiente. Pero hay que establecer matices.
Estamos hablando del experimento realizado por la firma Danfoss y del que se ha hecho eco la cadena danesa TV 2. Concretamente, han enviado a dos conductores de un camión eléctrico a la conocida carrera de Le Mans, en Francia. La meta, además de presenciar esta archiconocida competición, es concienciar sobre la situación de los camiones eléctricos.
No son los camiones, es Europa
La conclusión a la que han llegado estos profesionales tras este viaje de 1.300 kilómetros en camión eléctrico es que no se dispone de una red de carga homogénea en todos los países europeos. Ni la infraestructura ni las condiciones de carga son las mismas en el país de partida, Dinamarca, que en el de llegada, Francia.
"La tecnología está más que preparada para la electrificación del transporte pesado, pero Europa no", desgranó el conductor Claus Hansen, en referencia a las diferencias de facilidad para la carga que han experimentado en uno u otro lugar.
Precisamente, del ejemplo galo destacan que han tenido retrasos en la carga o que en el caso de Bélgica se han topado con trabas burocráticas en forma de una normativa especial para la conducción de camiones. De Hamburgo destacan las grandes colas.