Los tomates españoles prueban un innovador tensiómetro
Un pionero ensayo.
Tensión con los tomates, pero no la que te imaginas. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG de Cádiz) está detrás de pionero ensayo en el marco del proyecto 'Prácticas de lucha sostenible contra plagas en la agricultura gaditana' que se centra en la investigación de dos útiles herramientas, el tensiómetro y el lisímetro, según recoge el portal especializado Agro Información.
Se trata de dos artilugios empleados, el primero, para medir el esfuerzo que las raíces deben realizar para extraer la humedad del suelo, y el segundo, para extraer muestras de agua del suelo para su análisis químico. La iniciativa, financiada por la Diputación Provincial de Cádiz Área de Transición Ecológica y Desarrollo Urbano Sostenible, cuenta con un objetivo claro.
La meta está en brindar a los agricultores los conocimientos necesarios para la utilización de ambos instrumentos dirigidos a facilitar la gestión del campo y contribuyendo a calcular mejor las cantidades de agua de riego o de productos fertilizantes. La clave del proyecto pasa porque se desarrolla en el interior de los invernaderos de tomate de la costo noroeste gaditana, lo que supone el 79% de toda la superficie protegida dedicada a esta variedad.
En el invernadero
"Los invernaderos son sistemas de cultivo intensivos, en general con un ambiente, temperatura y aislamiento más o menos controlado. El sistema de riego es, generalmente, localizado por goteo, por lo que el cálculo de la dosis de riego, realizada por el agricultor, se hace casi siempre por observación, según la reacción de la planta al número de minutos diarios que se riega", desgrana Yolanda Gil, técnica responsable del proyecto de COAG Cádiz.
"Pese a la cantidad de herramientas de control de humedad, tanto para el suelo como la planta, tensiómetros, lisímetros, etc., éstos no suelen instalarse en los invernaderos, sobre todo, porque el agricultor no posee los conocimientos necesarios para la interpretación de los datos", añade Gil.
"De ahí surge la idea de dotar a los agricultores de los conocimientos precisos y necesarios sobre la tecnología que tiene a su alcance y cuál es la utilidad práctica de las herramientas que se encuentran a su disposición para facilitar la gestión de sus cultivos. Sobre todo, en lo referente al cálculo de las dosis de riego y fertilización", anota la persona al cargo de la iniciativa.