España reconfigura sus ametralladoras
Más duras, más resistentes, más versátiles. Sí, más letales.
El Ejército de España verá cómo una de sus armas da un salto clave en materia de calidad, colocándose a la altura de las necesidades actuales mediante un exhaustivo proceso de modernización. Se trata de una apuesta clara por el armamento del Ejército de Tierra, que se enmarca en un contrato por valor de diez millones de euros, según recoge el diario ABC.
Dicho proceso de actualización afectará a las ametralladoras MG1A3, veteranas de buena parte de los Ejércitos europeos y un nutrido grupo de los de otras naciones. El objetivo es que sean modernizadas a la versión MG3, un formato cuyo diseño se estableció en 1966, pero no comenzó su fabricación hasta dos años más tarde. En realidad, es el siguiente modelo al MG1, pero funciona como un rediseño de la MG42, mítica arma utilizada durante la Segunda Guerra Mundial para colocar en vehículos, nidos u posiciones de trinchera.
¿En qué consistirá la modificación a la que serán sometidas unas tres mil unidades a lo largo de tres años? Básicamente, se contempla la renovación de tres componentes clave de este tipo de ametralladoras. Concretamente, las del mecanismo de alimentación, el muelle real y la bocacha apagallamas -esta última, herramienta empleada para reducir la visibilidad de un disparo-.
¿Qué ventajas tendrán las ametralladoras actualizadas?
En este sentido, hay una serie de ventajas para las armas que surgirán de esta actualización. El modelo MG3 es conocido por contar con una mayor dureza, pero también con más resistencia a dos elementos clave en el terreno de batalla, la tierra y la arena.
Por otra parte, destacarán por su versatilidad, que se verá aumentada por el abanico de instalación y colocación que abre. Esta ametralladora se puede disparar tanto tumba en el suelo con un trípode como acoplada a un vehículo o blindado. No se trata de una cuestión que tomarse a la ligera, pues estamos hablando de un arma que pesa 10 kilos y cuyo cañón mide más de un metro de largo.
Todas estas utilidades se traducen en, lógicamente, mayor capacidad letal. Cuenta con un calibre de 7,62 mm y capacidad de disparo a una horquilla de entre 200 y 2.000 metros de distancia. Para hacerse una idea de su cadencia de fuego, es capaz de ejecutar hasta 1.200 impactos por minuto.