Un abogado ofrece 85 euros a una compañera por llevarle el caso y se toma fatal la negativa: "Si quieres te pago la reforma de tu casa"
Precarización e indefensión de abogado a abogado.
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La precariedad en la abogacía no es un fenómeno nuevo, pero hay situaciones que siguen sorprendiendo a quienes ejercen la profesión. Marina Guillén, una abogada penalista que ejerce en la ciudad de Marbella, recibió un mensaje por WhatsApp que la dejó perpleja: un compañero de profesión le ofrecía sustituirlo en un juicio que se celebraría en Málaga a cambio de 85 euros. No conocía el caso, el cliente y apenas tenía 7 días de preparación.
"Te escribo para proponerte una serie de colaboraciones en cuanto a sustituciones para señalamientos en Málaga y alrededores. La primera sería para el 20 de este mes. Consiste en un juicio por un delito básico de estafa informática. Te facilitaría la instructa y todas las actuaciones. Por nuestra parte, ofrecemos 121 euros con su correspondiente retención del IRPF", señalaba el mensaje de la propuesta, tal y como ha publicado el blog Confilegal.
Pero Guillén rechazó la propuesta de inmediato, amparándose en que la preparación del juicio requiere de tiempo y de conocimiento sobre el caso. "Mínimo hacen falta un par de días para prepararlo, depende de la complejidad y de las periciales que haya", le responde a su compañero, antes de que recordarle que no ha tenido contacto con su defendido: "Imagínate asumir un procedimiento que no has llevado, sin conocer ni siquiera al cliente".
Tampoco conocía al abogado que le acababa de ofrecer el trabajo, quien no encajó muy bien ni la negativa de Guillén ni sus dudas sobre los honorarios que le había propuesto en un principio. Así, en lugar de aceptar el rechazo, reaccionó con burla: "Si le parece bien, le pagamos la reforma de su casa. Quizá eso se ajuste más a sus pretensiones económicas".
Para la abogada del despacho G&G Legal, este episodio es un ejemplo de la degradación que vive la profesión. "Es que se está intentando aprovechar porque no sabemos lo que le cobra al cliente. El abogado era de Barcelona y quería que llevara el caso aquí, así también se ahorra el desplazamiento y todo el resto. Como si fuese un 'rider' de la abogacía", dice la abogada, quien también alerta de una "crisis muy seria" en el sector propiciada por los gabinetes lowcost y la falta de ética profesional.
"Muchos abogados que están empezando no pueden vivir de esto. Además, los colegios de abogados no controlan estas prácticas, lo que fomenta la explotación dentro del gremio", dice Guillén, que también cuestiona el sistema de honorarios liberalizados en la profesión. "Los notarios cobran por arancel, pero nosotros no tenemos una regulación clara. Esto permite que ocurran situaciones como esta, en las que no se está prestando un servicio de calidad ni se está dignificando la profesión", concluye.