Observan el mapa y la nube gigante que llega a España por Galicia, no es de lluvia
Ha viajado 5.000 kilómetros de distancia
La primera ola de calor el verano nos ha regalado la madrugada de este lunes la noche más calurosa en lo que va de verano, por lo que es probable que muchos no hayan podido pegar ojo por culpa de las temperaturas.
Una noche tropical que este lunes dará paso a otra jornada de calor extremo que pondrá en alerta a varias provincias españolas, donde las temperaturas podrán incluso llegar a los 45 ºC en su punto álgido, si bien a partir del martes las temperaturas irán descendiendo progresivamente hasta normalizarse por completo el jueves y poner fin a la ola de calor.
Donde no se notará tanto la incidencia de este episodio de calor extremo será en el tercio norte peninsular. Sin embargo, lo que sí se verá en los cielos es una nube que ha viajado más de 5.000 kilómetros de distancia y que, precisamente, no viene carga de lluvia que favorezca las lluvias y maquillar así la delicada situación de los embalses en España.
El servicio de meteorología gallego, Meteogalicia, ha compartido en su cuenta de Twitter una imagen del satélite en la que se puede observar la formación de tormentas en el centro peninsular, pero también como desde el noroeste se ve la llegada de una nube de humo de los incendios de Canadá.
"En la imagen de satélite se puede distinguir, además de las nubes de tormenta sobre la Península y las aguas del litoral cantábrico, una banda entrando por el noroeste de Galicia. Como vemos en el modelo CAMS, es humo procedente de incendios en Canadá", escribe el servicio meteorológico en su cuenta de Twitter.
La nube gigante de humo procede de los incendios desde hace semanas arrasan Canadá. Los últimos datos apuntan a más de 5,2 millones de hectáreas quemadas, con más de 400 focos repartidos por diferentes puntos y unas 32.000 personas evacuadas.
La nube de humo ha recorrido los más de 5.000 kilómetros que separan Europa del continente americano impulsada por una corriente en chorro que puede teñir de color grisáceo los cielos de Portugal, España o, incluso, Francia. De momento, Galicia es la primera comunidad autónoma en la que ya se nota la nube de humo de los incendios de Canadá.
Hace algunas semanas, Estados Unidos fue víctima del mismo fenómeno, que dejó peculiares imágenes en varias ciudades, especialmente en Nueva York. Durante ese tiempo, el humo cubrió gran parte del país, tiñendo el cielo de un tono naranja, con recomendaciones de limitar las salidas de casa.