Mide más que un niño de 9 años y todos lo confunden con un perro: así es el felino más viral del mundo
"Todos lo adoran", cuenta su dueña, Natalie Bowman.
Pese a su imponente tamaño, Finn se ha ganado el corazón de todos los ciudadanos de San Carlos, una ciudad situada en California, gracias a su entrañable personalidad. Se trata de un Maine Coon que mide 1,3 metros, lo mismo que podría medir un niño de nueve años. Su dueña, Natalie Bowman, lo describe como un "giant gentle" cuyo corazón es tan grande como su cuerpo.
El tamaño de Finn ha captado la atención de muchos curiosos, quienes incluso se acercan pensando que se trata de otro animal. "Al principio, la gente piensa que es un perro", comenta Natalie en Daily Galaxy. "Luego se acercan y se dan cuenta de que es un gato. Siempre los toma por sorpresa y simplemente lo adoran", añade.
Cuanto Natalie lo adoptó en 2017, el felino era un pequeño gato de tres meses. Pero, todo cambió pronto. Como buen representante de la raza Maine Coon, conocida por su gran tamaño y apariencia majestuosa, Finn creció rápidamente hasta superar con creces la medida de la mayoría de los gatos domésticos.
Un amante de los abrazos
Natalie describe a su gran amigo como "muy divertido, siempre buscando abrazos y con una personalidad entrañable". Su naturaleza juguetona y afectuosa lo ha convertido en el favorito de la familia Bowman, de los vecinos e incluso de los visitantes. "El tamaño de Finn puede ser lo primero que la gente nota", afirma Natalie, "pero su personalidad es lo que realmente los conquista".
Sin embargo, su profunda conexión emocional con Natalie también trae consigo cierta ansiedad por separación, un rasgo común entre mascotas muy unidas a sus dueños. Para mitigar estos momentos, Natalie lleva frecuentemente a Finn a su lugar de trabajo, donde ha asumido el rol de mascota no oficial. Allí, tanto el personal como los clientes disfrutan de su carismática presencia, y Finn parece florecer bajo tanta atención.
Pero no todo es bonito. Mantener a un gato del tamaño de Finn requiere un compromiso especial, sobre todo en lo que respecta a su alimentación. Natalie gasta unos 150 dólares al mes en comida, alimentándolo entre 3 y 4 veces al día. "Es un gran amante de la comida. Siempre está listo para su próxima comida", afirma la mujer.