¿Los emojis van antes o después del signo de cierre de un enunciado? La RAE es clarividente al respecto
Su capacidad para añadir expresividad y matices a los mensajes escritos es innegable.

La Real Academia Española (RAE) ha establecido directrices claras sobre la colocación de emojis en los textos escritos. En la era digital, los emojis se han convertido en una herramienta esencial para expresar emociones y matices en la comunicación escrita. Sin embargo, su uso ha generado dudas sobre su correcta colocación en relación con los signos de puntuación. La Real Academia Española (RAE) ha abordado esta cuestión, proporcionando pautas claras para su uso adecuado.
Los emojis, esos pequeños iconos que representan emociones, objetos o ideas, han revolucionado la forma en que nos comunicamos. Su capacidad para añadir expresividad y matices a los mensajes escritos es innegable. Sin embargo, su integración en la escritura formal ha planteado interrogantes sobre cómo deben interactuar con los signos de puntuación tradicionales.
La RAE ha dejado claro que los emojis no son signos de puntuación y, por lo tanto, no deben interferir con el uso correcto de estos. Según la RAE, los emojis deben colocarse de manera que no generen ambigüedades ni interfieran con la claridad del mensaje. La posición de los emojis en relación con los signos de cierre de enunciado depende del alcance del emoji en el mensaje.
Cuando un emoji afecta a todo el mensaje, la RAE recomienda situarlo después del signo de cierre del último enunciado. En estos casos, no es necesario colocar otro punto detrás del emoji. Por ejemplo: "Bueno, queridos, me caigo de sueño y creo que va siendo hora de irme a dormir. Hasta mañana. 👋" En este ejemplo, el emoji de la mano saludando se coloca después del punto final, ya que afecta a todo el mensaje anterior.
Si el emoji afecta solo a uno de los enunciados que conforman el mensaje, lo más adecuado es situarlo delante del signo de cierre de ese enunciado. Esto evita que el emoji parezca modificar el enunciado siguiente. Por ejemplo: "Estoy loco por ti 😍. ¿Puedo invitarte a cenar el sábado?" Aquí, el emoji de la cara enamorada se coloca antes del punto, ya que solo afecta al enunciado "Estoy loco por ti".
Cuando un emoji aparece en el interior de un enunciado, coincidiendo con un signo de puntuación, la RAE indica que debe situarse delante de este. Por ejemplo: "Últimamente no me encuentro muy bien 😥, pero supongo que todo mejorará." En este caso, el emoji de la cara triste se coloca antes de la coma, ya que forma parte del enunciado.
En aquellos casos en los que el emoji se use como una pieza léxica, es decir, en sustitución de una palabra, la puntuación del enunciado en el que se integre no debe verse alterada. Los signos de puntuación que correspondan deben mantenerse en su lugar. Por ejemplo: "Estoy en el 🚗, así que te llamo más tarde, cuando llegue a 🏠." Aquí, los emojis del coche y la casa sustituyen a las palabras "coche" y "casa", respectivamente, sin alterar la puntuación del enunciado.
Cuando se quieran usar consecutivamente varios emojis distintos o el mismo emoji repetido, bien para expresar un plural, bien para intensificar la emoción que se quiere transmitir, no deben separarse por comas ni por ningún otro signo de puntuación. Por ejemplo: "¡El domingo comemos paella! 😄👏😋" En este ejemplo, los emojis de la cara sonriente, las manos aplaudiendo y la cara saboreando no se separan por comas, ya que se utilizan para intensificar la emoción del mensaje.