La razón por la que el libro Guinness de los récords se llama igual que la cerveza
La conexión entre el libro y la cerveza ayudó a fortalecer la marca y a aumentar su visibilidad en el mercado global.
En el mundo de los récords y las hazañas extraordinarias, el Libro Guinness de los Récords se ha convertido en una referencia indiscutible. Sin embargo, pocos conocen la curiosa historia detrás de su nombre y su conexión con la famosa cerveza Guinness. Este artículo explora los orígenes de esta relación y cómo una simple discusión en un pub llevó a la creación de uno de los libros más vendidos del mundo.
La historia comienza en 1951, cuando Sir Hugh Beaver, entonces director ejecutivo de la cervecería Guinness, participaba en una cacería en el condado de Wexford, Irlanda. Durante la jornada, surgió una discusión sobre cuál era el ave de caza más rápida de Europa. Incapaces de encontrar una respuesta en los libros de referencia disponibles, Beaver se dio cuenta de que muchas de estas preguntas quedaban sin respuesta, especialmente en los pubs, donde las discusiones sobre hechos curiosos eran comunes.
Inspirado por esta experiencia, Sir Hugh Beaver tuvo la idea de crear un libro que recopilara datos y hechos curiosos para resolver este tipo de debates. En 1954, decidió llevar a cabo su visión y contactó a los gemelos Norris y Ross McWhirter, quienes dirigían una agencia de documentación en Londres. Los McWhirter eran conocidos por su habilidad para recopilar y verificar datos, lo que los hacía perfectos para la tarea.
El 30 de noviembre de 1954, se constituyó Guinness Superlatives, la empresa encargada de la creación del libro. La oficina se estableció en dos salas de un gimnasio en Fleet Street, Londres. Los gemelos McWhirter comenzaron una intensa fase de investigación, escribiendo el libro en trece semanas y media, trabajando 90 horas a la semana, incluidos fines de semana y festivos. El primer ejemplar del Libro Guinness de los Récords se publicó el 27 de agosto de 1955.
Para compilar el libro, los McWhirter escribieron a expertos en diversas disciplinas, como astrofísicos, zoólogos, meteorólogos, economistas y criminólogos. En lugar de pedir información precisa, aventuraban una respuesta y solicitaban a los expertos que la confirmaran o corrigieran. Este enfoque facilitó la recopilación de datos, ya que las personas eran más propensas a corregir una opinión que a proporcionar información de manera proactiva.
El éxito del libro fue inmediato. La primera edición se agotó rápidamente y se convirtió en un fenómeno de ventas. La popularidad del Libro Guinness de los Récords creció exponencialmente, y a lo largo de los años, se ha traducido a múltiples idiomas y se ha actualizado anualmente para incluir nuevos récords y hazañas.
La razón por la que el libro lleva el nombre de Guinness está directamente relacionada con la cervecería. Sir Hugh Beaver, como director ejecutivo de Guinness Brewery, vio en el libro una oportunidad de promoción para la marca. La idea era que el libro se distribuyera en los pubs, donde la cerveza Guinness era una bebida popular, y se utilizara para resolver las discusiones que surgían entre los clientes. De esta manera, el libro no solo servía como una herramienta de referencia, sino también como una estrategia de marketing para la cerveza.
La cervecería Guinness, fundada en 1759 por Arthur Guinness en Dublín, Irlanda, ya era una marca reconocida y respetada en todo el mundo. La cerveza Guinness, conocida por su distintivo color oscuro y su sabor característico, se había convertido en un símbolo de la cultura irlandesa. La conexión entre el libro y la cerveza ayudó a fortalecer la marca y a aumentar su visibilidad en el mercado global.
El impacto cultural del Libro Guinness de los Récords ha sido significativo. No solo ha documentado algunas de las hazañas más extraordinarias del mundo, sino que también ha inspirado a millones de personas a intentar romper récords y a superar sus propios límites. La marca Guinness World Records se ha expandido más allá del libro, con programas de televisión, eventos en vivo y una fuerte presencia en las redes sociales.
A lo largo de los años, el libro ha evolucionado para incluir una amplia variedad de categorías, desde logros humanos hasta fenómenos naturales. Los récords van desde lo más grande y lo más pequeño hasta lo más rápido y lo más lento, abarcando prácticamente todos los aspectos de la vida. Esta diversidad ha contribuido a su popularidad y a su relevancia continua en la cultura moderna.