La OCU responde frente a los rumores de estafa de una popular tienda de manga española

La OCU responde frente a los rumores de estafa de una popular tienda de manga española

La organización ha lanzado una serie de recomendaciones para los afectados por el problema.

A picture of Manga comic books being sold in a store.Getty Images

Una de las tiendas de manga y anime españolas más destacadas, Global Freaks, ha causado una mezcla de decepción y enfado en sus clientes. "Es una vergüenza", comentan algunos usuarios en redes sociales.

La empresa ha cerrado su establecimiento en Barcelona y, aunque la tienda online sigue operativa, muchas personas están denunciando retrasos en los pedidos de figuras pese a que el encargo ya está pagado. Asimismo, se quejan de no recibir ninguna respuesta por parte de la compañía cuando tratan de reclamar esta situación. 

"Aquí tengo yo mi pre-reserva pagada en su totalidad, una vergüenza, en principio salía en junio/julio", lamenta una persona en X, adjuntando una imagen que demostraría que realizó su pedido el 30 de enero de 2023 y que todavía no ha recibido nada.

La compañía se defiende

Tras varios días de revuelo, Global Freaks emitió un comunicado para expresar sus "más sinceras disculpas" a los clientes y asegurarles que están trabajando para solucionar el problema: "Nuestro objetivo es cumplir con nuestras responsabilidades y compromisos de la manera más transparente posible". 

La empresa confesó que "las sociedades del grupo que ostentan la titularidad de la marca Global Freaks se encuentran en una situación de colapso financiero que no estaba prevista" debido a haber sido incluida como empresa en el fichero de ASNEF.

"Tras dicha inclusión, la banca y otras entidades financieras reaccionaron al unísono, provocando el bloqueo de todas las fuentes de recursos de la empresa. Por tanto, es cierto que los empleados no estaban al corriente del cierre, pero también, con toda rotundidad, que a finales de la semana pasada (4 de octubre), ni los directivos ni los asesores sabían lo que estaba por venir", argumentó.

"Hasta el momento del bloqueo de cuentas, las empresas del grupo estaban al día de pago de todos sus proveedores, bancos, entidades financieras y deudas con las administraciones públicas. Igualmente, afirmamos que, a día de hoy, no se adeuda cantidad alguna a los trabajadores", recordó, indicando que solo tenía una deuda con un proveedor, pero que "que se estaba resolviendo de manera acordada entre ambas partes".

La empresa aseguró que la intención era "servir todo el producto que ya está en almacén y que está cobrado en su totalidad, así como mantener la tienda abierta para servir material y permitir cambios de vales o cupones por producto". Por ello, los empleados trabajaron con normalidad el 7 de octubre.

Sin embargo, afirma que se vio obligada a cerrar por el revuelo causado en redes sociales: "Filtraciones internas y la propagación de información adulterada en redes sociales, generaron una reacción comprensible, pero descontrolada, por algunos clientes. La situación escaló con la presencia de personas en la tienda y en nuestras instalaciones con actitudes agresivas, por lo que la seguridad de nuestros empleados obligó a suspender las actividades".

¿Qué pueden hacer los afectados?

Algunos agradecen el comunicado de la empresa, pero la mayoría considera que no se pone solución a los problemas de quienes esperan su pedido o quieren el dinero de vuelta. Por eso, la OCU ha lanzado una serie de recomendaciones, aunque avisa de que "las alternativas para los clientes no son sencillas".

  • Quienes reservaron o compraron algo en la tienda online durante los últimos 15 días, pueden acogerse al derecho de desistimiento reconocido en las compras a distancia, así como en la tienda física si la empresa lo permite. "Si el pago fue con Paypal, en caso de que la devolución de los importes pagados no se hiciera en plazo podrías intentar una disputa", explica la OCU.
  • En el caso de productos ya pagados y no entregados hay dos opciones. "Si el pago se ha realizado por Paypal puedes iniciar una disputa por no haberse realizado la entrega" en un plazo de 180 días. Si el resultado no favorece al consumidor, se puede iniciar una reclamación formal. Por otra parte, "si pagaste con tarjeta, también es posible reclamar la devolución del dinero: las entidades emisoras de tarjetas suelen disponer de mecanismos de reclamación en estas situaciones, aunque no está garantizado que el banco sea capaz de recuperar el dinero".
  • Para los productos de los que haya pagos aplazados pendientes, "deberás decidir si asumes el riesgo de seguir confiando en la viabilidad de la empresa y por lo tanto seguir realizando los pagos comprometidos o no". En caso de no pagar más, la empresa puede considerar la reserva como anulada y, salvo que ofrezca una alternativa, el cliente puede quedarse sin dinero y sin el producto.