La fuga de dos presos conocidos deja en evidencia a Italia

La fuga de dos presos conocidos deja en evidencia a Italia

Se trata de dos hermanos que están siendo buscados por toda la región. Desde la administración y el sindicato policial italiano reclaman más personal y mejoras en las instalaciones penitenciarias.

Cárcel de NápolesNurPhoto via Getty Images

Las autoridades italianas han notificado en las últimas horas que dos presos se han fugado de la cárcel de Beccaria, en Milán. Según informaron, se trata de dos hermanos que en los últimos meses ya protagonizaron varios episodios violentos, provocando revueltas en las instancias penitenciarias que pudieron ser sofocadas.

Esta información fue comunicada por el secretario del SAPPE (Sindacato Autonomo Polizia Penitenziaria), Alfonso Greco, que además ha alertado de la precariedad y falta d recursos en multitud de prisiones en todo el país. Greco explicó que "estaban en el grupo de avanzada y que son los mismos que promovieron las últimas revueltas y no fueron trasladados pese a su comportamiento".

De hecho, uno de los dos hermanos ya intentó huir en otras dos ocasiones anteriormente, y Greco denunció que "desde hace meses, SAPPE pide tomar una posición a nivel ministerial para proteger a las personas que trabajan en primera línea", como es la Policía Penitenciaria.

El reincidente, ya se escapó en junio, pero pudo ser localizado a los pocos días. Pero esto, denuncia Gennarino De Fazio, secretario general de la Policía Penitenciaria de Ulipa, es el día a día de las prisiones italianas como consecuencia del "descuido político y administrativo que arras desde hace demasiados años".

También aseguró que desde el momento en que se conoció la huida de los dos presos, numerosas patrullas se desplazaron para encontrarlos, y espera que en pocos días puedan localizarlos y volver a entregarlos a la prisión.

Además, desde los ´órganos penitenciarios denuncian que el sistema presenta lagunas en el momento en que menores de 14 años tienen que compartir unidad penitenciara con personas de hasta 25 años, ya que la legalidad establece que una persona deberá cumplir la pena en el lugar donde la inició, lo que provoca situaciones inexplicables "de jóvenes de 18 años en las cárceles de adultos y mayores de 23 en cárceles de menores", declaró el secretario general de Sappe Donato Capece.