Estos son los plazos para incorporar torpedos en el submarino español de clase mundial
La Armada recibe en Cartagena el S-81 Isaac Peral en presencia de Margarita Robles.
Después de unos cuantos retrasos, la Armada española recibirá este jueves en el astillero de Navantia en Cartagena (Murcia), en un acto al que asistirá la ministra de Defensa Margarita Robles, el súper submarino español que todos quieren: el S-81 Isaac Peral. Sin embargo, hasta que entre en servicio, el sumergible debe someterse y superar más pruebas, como los ejercicios de lanzamiento de minas y torpedos.
El proceso de transformación del submarino español que ha marcado un hito a escala mundial y que lo convertirá en buque de guerra, culminará en aproximadamente un año. Durante este período, el S-81 Isaac Peral tendrá que enfrentarse tanto a pruebas de resistencia como a la evaluación operativa de los Requisitos de Estado Mayor (REM).
Entre los hitos que la Armada ha definido en el calendario de la Flotilla de Submarinos, se encuentran las pruebas de armamento, que incluyen ejercicios específicos sobre el empleo de torpedos y minas. Estas pruebas permitirán "avanzar en el conocimiento de la plataforma", al mismo tiempo que la Armada sigue depurando la doctrina de empleo de estas armas, un aspecto crucial en la preparación del S-81 Isaac Peral, según Infodefensa.
El Isaac Peral realizó hace dos semanas su última prueba de navegación en aguas de Cartagena. Permaneció sumergido y, posteriormente, navegó mar adentro durante la realización de diferentes pruebas.
Paralelamente, la Base de Submarinos en el Arsenal de Cartagena se ha sometido a significativas adaptaciones. Desde la adecuación de las fosas de atraque hasta la construcción del Centro Integrado de Vigilancia en Tierra (CIVT) para garantizar el óptimo desempeño y la operatividad máxima de los nuevos submarinos de la clase S80. Las próximas fases contemplan incluyen la remodelación de los muelles y la preparación de pañoles y edificios para las dotaciones del submarino.
El programa S-80 de la Armada y Navantia
El programa de submarinos convencionales oceánicos S-80 de última generación supone para la Armada española situarse entre las mejor dotadas del mundo en cuanto al arma submarina, y para Navantia colocarse entre los diez países capaces de diseñar y construir submarinos convencionales en todo el mundo.
Se trata de uno de los proyectos tecnológicos más complejos llevado a cabo en España y conlleva un trabajo de ingeniería altamente especializado, ya que la construcción de submarinos implica disponer de una industria naval militar de altísima cualificación técnica.
Asimismo, el programa lleva consigo una gran evolución del tejido industrial y tecnológico de defensa de España, que está a punto de entrar en el selecto grupo de países capaces de construir submarinos. Con un efecto tractor industrial de la comarca de Cartagena, el programa contribuye anualmente con cerca de 2.000 empleos directos y de industria auxiliar y con hasta 7.000 puestos de trabajo de calidad en la región.
El diseño de estos submarinos, con una eslora de 80,8 metros y un diámetro de 7,3 metros, se parece más al de una nave espacial que al de un buque en superficie y está pensado para operar autónomamente y con gran sigilo durante largos periodos de tiempo, gracias a un revolucionario sistema de propulsión independiente de la atmósfera que le permite generar y almacenar energía eléctrica.
Tras el S-81 llegarán otros tres sumergibles que se encuentran en la fase de producción, con diferentes grados de avance. Todos ellos han sido bautizados con nombres de pioneros de la navegación submarina, el S-82 'Narciso Monturol', el S-83 'Cosme García' y el S-84 'Mateo García de los Reyes', que se irán entregando a la Armada entre 2024 y 2028.